Desde las garras de la violencia doméstica hasta la luz de la recuperación: Minsa brinda apoyo a víctima de feminicidio
Nota de prensaTras estar hospitalizada por varios meses en el Hospital Nacional Cayetano Heredia, Sonia Ventura Huerta, respaldo del sistema de salud, logra recuperarse



Fotos: Hospital Nacional Cayetano Heredia
8 de marzo de 2024 - 10:24 a. m.
Tras una lucha incansable por su vida y el arduo trabajo conjunto entre el Ministerio de Salud (Minsa) y el Hospital Nacional Cayetano Heredia, Sonia Ventura Huerta, una mujer valiente procedente de Ucayali, víctima de un intento de feminicidio, ha sido dada de alta después de varias semanas de hospitalización.
La historia de Sonia es un relato de valentía y supervivencia. El 22 de noviembre del año pasado, ingresó al Hospital Nacional Cayetano Heredia desde el Hospital Regional de Pucallpa, con múltiples lesiones y fracturas en la cara, cráneo y extremidades superiores, incluyendo la mutilación de algunos dedos. Su cuerpo llevaba el peso de un ataque violento realizado por su propia pareja, un acto que buscaba silenciarla, pero que solo logró avivar su determinación por vivir.
Desde el primer día, Sonia se convirtió en un símbolo de resistencia. Su historia movilizó a toda la comunidad médica, que no solo se encargó de sanar sus heridas físicas, sino que también le brindó el apoyo emocional y psicológico necesario para enfrentar el trauma que la acompañaría en su recuperación.
"Estamos contentos de haber contribuido a la recuperación de Sonia. Ahora podrá reunirse con sus seres queridos, quienes le brindarán el apoyo y el amor necesarios para su total recuperación. Nuestra institución, con nuestro equipo de profesionales, siempre está atento al llamado que haga el Ministerio de Salud para atender estos casos, que son sensibles y que necesitan una atención especializada y multidisciplinaria", expresó el Dr. Acho Mego. Médicos, enfermeras y personal de apoyo celebraron esta victoria en la batalla por la vida de Sonia.
El camino hacia la recuperación fue largo y lleno de obstáculos, pero Sonia nunca estuvo sola. El Seguro Integral de Salud (SIS) cubrió todos los costos de su atención médica, incluyendo cirugías, terapias y traslados terrestres para ella y su madre, quien nunca se separó de su lado. Además, en colaboración con el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, se facilitó la inscripción de Sonia en el Registro Nacional de la Persona con Discapacidad del Conadis debido a las limitaciones que enfrentó tras el ataque.
Un ejemplo de valentía y resiliencia
Al llegar al Hospital Nacional Cayetano Heredia, Sonia fue ingresada a la Unidad de Cuidados Intensivos, estando más de 20 días con ventilación asistida. Su cuidado demandó su ingreso a sala de operaciones en múltiples oportunidades para limpiezas quirúrgicas y el 23 de diciembre del año pasado, fue sometida a cirugías maxilofacial y de otorrino, para corrección de múltiples fracturas de cara.
Finalmente, estuvo hospitalizada en el Servicio de Traumatología, Cirugía Plástica y Reconstructiva, donde se le realizó una operación ante la fractura que tenía en ambos antebrazos y codo derecho. “Lo que hicimos fue colocarle una doble placa en el antebrazo izquierdo y una placa en el cubito del antebrazo derecho. Esto le va a permitir recuperar la movilidad de los dos codos. Según avancen las semanas y la paciente inicie su terapia de rehabilitación, su recuperación se hará más sostenible”, señaló el Dr. Martin Ormeño Gutiérrez, jefe de dicho servicio.
La historia de Sonia no termina aquí. Pese a las cicatrices físicas y emocionales que llevará consigo, su voz se alza como un grito de justicia y esperanza. Su coraje inspira a todos los que la rodean, recordándonos que la violencia de género no puede ser tolerada ni silenciada. Emocionada y con una gran sonrisa, Sonia se despidió del hospital que la acogió.
"Estoy contenta por recuperar mi vida, siempre he sido una mujer activa y trabajadora. Ahora que ya me siento mejor y puedo caminar, aunque despacio todavía, siento que muy pronto me recuperaré. Agradezco a los médicos, técnicos y enfermeras por cuidarme durante estos casi cuatro meses en el Hospital. Me llevo un bonito recuerdo de ellos y del cariño que me han brindado", compartió emocionada.
A medida que Sonia emprende el próximo capítulo de su vida, su historia permanece como un recordatorio de la fuerza y la resiliencia. Que su valentía nos inspire a seguir luchando por un mundo más justo y seguro para todas y todos.