Minsa publica rotafolio para fomentar el cuidado mutuo frente a la violencia de género

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la violencia contra las mujeres es una violación de los derechos humanos que tiene su origen en la desigualdad de género y es un problema de salud pública. Por ello, el Ministerio de Salud (Minsa), a través de la Dirección de Salud Mental y en colaboración con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), ha elaborado el rotafolio titulado: “Cuidado de la salud mental frente a la violencia contra las mujeres en la comunidad”.

Se trata de un material educativo que busca fomentar el cuidado mutuo frente a la violencia de género. Consta de 47 páginas y está dirigido a la población en general, principalmente a actores sociales como agentes y líderes comunitarios, quienes realizan actividades de orientación de manera individual o grupal. 

La publicación presenta información sobre las leyes que protegen a las víctimas de violencia, también permite reconocer los factores de riesgo y protección, las señales de alerta para detectar los diferentes tipos y modalidades de violencia, así como identificar las instituciones dónde pueden acudir por ayuda y la ruta para acceder a servicios de salud integrales y de salud mental.

El rotafolio está publicado en la Biblioteca virtual del Minsa a través del link http://bvs.minsa.gob.pe/local/MINSA/5926.pdf

Durante los meses de enero a noviembre de 2022, los establecimientos del Ministerio de Salud (Minsa) atendieron 141 511 casos de violencia contra las mujeres, de los cuales el 39 % de las sobrevivientes tiene entre 30 a 59 años y enfrentan múltiples afectaciones en su salud mental, como un mayor riesgo de sufrir depresión, ansiedad, estrés postraumático, insomnio, consumo de alcohol y otras sustancias adictivas, suicidio, entre otros.

Frente a este panorama, los establecimientos de salud y los 248 Centros de Salud Mental Comunitaria (CSMC) a nivel nacional del Minsa brindan atenciones gratuitas con el Seguro Integral de Salud (SIS) y cuentan con un equipo de profesionales multidisciplinarios como personal de psiquiatría, psicología, enfermería, trabajo social, entre otros, para atender las secuelas de violencia contra las mujeres, además articulan con el Centro Emergencia Mujer (CEM) para que reciban soporte socio legal