Minsa insta a la sociedad a no estigmatizar ni discriminar a las personas con algún problema de salud mental

El Ministerio de Salud (Minsa), a través de la Dirección de Salud Mental, instó a la sociedad a no estigmatizar ni discriminar a las personas con un problema de salud mental, pues ello ocasiona que empeore en su sufrimiento psíquico que es uno de los peores impactos en su salud.

En ese sentido, el Minsa rechaza que se usen actividades comerciales para reforzar estereotipos sobre problemas de salud mental y los servicios para su tratamiento.

De acuerdo a la OPS/OMS, el estigma es una marca que excluye a una persona de las demás y que disminuye su valor en el grupo social al que pertenece. Además, se refiere a la actitud y los comportamientos negativos hacia las personas con problemas por consumo de sustancias y de salud mental.

Mientras que la discriminación es una acción o decisión que amenaza a una persona o a un grupo de personas de forma diferente y que puede estar basada en la raza, el origen nacional o étnico, el color, la religión, el sexo, la edad o la discapacidad física, mental o psicosocial.

El Dr. Yuri Cutipé, director de la Dirección de Salud Mental del Minsa, explicó que el descalificar o estigmatizar a las personas con un problema en su salud mental genera que tengan temor de asumir el problema y a buscar ayuda; además, provoca que quienes estén en su entorno y la propia comunidad tiendan a no reconocer sus los derechos ni a ser sensibles a sus necesidades y solidarios ni menos a contribuir con su recuperación.

“El mundo se plantea una lucha contra el estigma de los problemas de salud mental, estigma que genera conductas y actitudes discriminatorias contra las personas que sufren de estos problemas. Debe tenerse claro que cualquier persona con un problema de salud mental no debe ser sujeto de descalificación, denigración o burla, de modo que pueda sentir a la sociedad como un espacio seguro a pesar de tener un sufrimiento psíquico”, indicó.

Cutipé Cárdenas señaló que el banalizar, el burlarse directa o indirectamente a través del lenguaje en sus diferentes formas (conversaciones, escritos o anuncios publicitarios) son expresiones que tienden a descalificar a la persona, no ponen de relieve su necesidad, su sufrimiento, ni menos sus derechos ni contribuyen a su recuperación.

Para el especialista, la sociedad ha descalificado tanto a las personas con sufrimiento psíquico y al propio sufrimiento que las personas obviamente tienen temor a ser rechazadas y a ser objeto de burla, incluso al momento de buscar los servicios vinculados al tratamiento de un problema de salud mental.

“Por ello la importancia de cuidar la salud mental, pues es uno de los fines de una sociedad solidaria, así como como es la expresión de las condiciones de ésta respecto al bienestar al que todos tenemos derecho, pero también es un medio para lograr el desarrollo de cada persona y de la propia sociedad”, puntualizó.

Para el Dr. Cutipé, el cuidado de la salud mental pasa por promover el autocuidado, pero ello será insuficiente si no hay un cuidado comunitario, ya que la salud mental es muy sensible a las situaciones estresantes que hay en el entorno de las personas; por ejemplo, en los niños, la salud mental es muy sensible al buen trato o mal trato en la crianza o educación.

“Si los adultos que están en el entorno de una niña o niño no gozan de salud mental, es probable que ese niño o niña también tenga problemas en su salud mental. En los adultos la salud mental es muy sensible en la seguridad en el trabajo, la seguridad financiera, el acceso a la vivienda de calidad, seguridad pública, a las redes de protección en la comunidad y disponibilidad de servicios para vivir de manera digna”, aseveró.