Consumo de tabaco en madres gestante es el principal factor de mortalidad perinatal
Nota de prensa
30 de mayo de 2003 - 12:00 a. m.
La madre gestante y el niño por nacer requieren una serie de cuidados especiales durante la etapa en la que se encuentran, por ello la toma de precauciones es vital en este período y en sí a lo largo de la vida. Uno de ellos es evitar totalmente el consumo del cigarrillo que resulta dañino debido a los graves efectos nocivos que ocasiona para la salud de ambos.
Por tal razón, los especialistas del Ministerio de Salud dentro de lo que establece la estrategia nacional Perú Vida 2012 manifiestan que la mujer que fuma corre el riesgo de disminuir su fertilidad, como consecuencia de los componentes químicos contenidos en el cigarro. En base a ello es recomendable evitar el consumo de este producto y mantenerse alejado cerca de personas que lo consuman.
Indudablemente el cigarrillo es dañino para la salud de las personas debido a los efectos de la nicotina y el alquitrán que originan trastornos en el organismo El tabaquismo en la madres gestante retarda el crecimiento del niño por nacer, ocasionando la disminución de 200 gramos en el peso promedio al nacer, y multiplica por dos el riesgo de este déficit.
Asimismo, amigos lectores ustedes deben estar enterados de que una madre gestante que ha fumado tiene mayor riesgo de abortar o de tener un parto prematuro. El niño que nace de esta mujer tiene mayores posibilidades de muerte perinatal, (morir en el primer mes de vida) asociado al síndrome de muerte súbita. Además, el niño podría presentar problemas de conducta escolar por concentración y tiene una mayor prevalencia a ser fumador debido a que crea la adicción a la nicotina trasmitida desde su proceso de crecimiento intrauterino.
Estudios actualizados revelan que el cerebro biparietal del niño producto de una madre que fuma durante el embarazo puede ser más pequeño que el de un niño cuya madre no fuma, trayendo como consecuencia problemas de retención y de aprendizaje, los cuales se hacen evidentes en la adolescencia.
Estos trastornos en el bebé se producen porque éste se nutre a través de la placenta, por medio del cual le llegan los alimentos y el oxígeno. Cuando la gestante fuma se produce una disminución de la oxigenación por un incremento de monóxido de carbono, alterando de este modo las funciones respiratorias celulares y afectando el desarrollo del crecimiento y función celular del niño por nacer.
Por otro lado, el acto de fumar le produce a la madre gestante un cierre de vasos sanguíneos por efecto de la nicotina, debido a que el organismo intenta compensar la falta de oxígeno para que la sangre circule más rápido. Esto a su vez produce alteraciones en el metabolismo de la placenta y en el transporte de aminoácidos. Esto también afecta la óptima nutrición del bebé.
Finalmente, el consumo del tabaco incrementa las alteraciones a nivel cromosomático por la concentración de alquitrán. Ello puede provocar una alteración estructural a nivel de los cromosomas y es probable que cause anormalidades, como alteraciones en la formación cardiovascular e inmadurez en la formación de los bebés.
El tabaquismo también ocasiona en la mujer enfermedades como cáncer de laringe, lengua, pulmón, vejiga, y del cuello uterino; efisema, infarto cardiaco o cerebral, enfermedad vascular periférica y úlceras, entre otras.
Por todo lo anterior, se recomienda que las madres gestantes deben permanecer en lugares libres de humo, que aseguren el bienestar tanto suyo como la del niño por nacer,
La estrategia nacional Perú Vida 2012 constituye una Política de Estado y busca asegurar el logro de metas que influirán de manera significativa en la salud y la vida de las personas, la familia y la comunidad. Al sector Salud y a la sociedad le corresponde informar, educar, promover y proteger el derecho de las personas, en este caso, a vivir con cultura de paz y sin drogas.