Deporte y ejercicios de relajación evitan complicaciones por ansiedad

Nota de prensa

7 de agosto de 2004 - 12:00 a. m.

El aprender a controlar su nerviosismo (con una adecuada técnica de respiración), practicar técnicas de relajación o realizar ejercicios ayudan a canalizar la ansiedad y evitar caer en cuadros extremos, indicó el Dr. Martín Nizama Valladolid, director del Instituto Especializado “Honorio Delgado - Hideyo Noguchi” del Ministerio de Salud (MINSA), que desde el 2003 hasta julio de este año atendió un total de 3 mil 241 casos de ansiedad.

Al respecto, el director del referido instituto, Dr. Martín Nizama Valladolid, explicó que la ansiedad o angustia, comúnmente llamada “nervios”, es un trastorno o desorden que se manifiesta mediante la inquietud y el desasosiego. Agregó que sin tratamiento oportuno puede complicarse peligrosamente con casos extremos de depresión, intentos suicidas, excesivo consumo de alcohol o de otras sustancias.

Igualmente refirió que, de acuerdo al estudio epidemiológico en Salud Mental realizado el año 2002 por dicho Instituto, el 21 por ciento de la población de Lima y Callao presenta ansiedad en algún momento de su vida, mientras que una de cada diez mujeres padece este mal.

Este trastorno se genera por factores internos como el incremento de la adrenalina, sensaciones de malestar interior, infelicidad, soledad, vacío espiritual y odio que las torna más vivenciales, así como por situaciones externas como la inseguridad ciudadana, el desempleo, la pobreza y la falta de oportunidades, detalló el funcionario.

En este contexto, indicó que lo más importante para una persona que empieza a manifestar estos síntomas es la prevención, a través de la cual debe canalizar su nerviosismo hacia la práctica de deportes, caminatas, entre otras rutinas de esfuerzo físico y relajación.

OTROS SÍNTOMAS
Además de los síntomas mencionados, hay otras manifestaciones que se presentan por ansiedad, como inquietud, estar muy alerta, sentir inseguridad y desconfianza, comerse las uñas, sacarse constantemente conejos de las manos, suspirar mucho, apretar los dientes, ir constantemente al baño, sudar en exceso, tener incremento de la presión arterial y de la frecuencia cardiaca.

Al irse agravando las referidas conductas se produce falta de sueño, baja productividad laboral, molestias como dolores estomacales, mayor irritabilidad buscando o creando conflictos con la pareja y con su entorno, eyaculación precoz, tensión muscular, distraibilidad. Entonces la persona trata de calmarse fumando excesivamente o tratando de aplacar sus ansias con pastillas como ansiolíticos, detalló el Dr. Nizama Valladolid.

“Cuando la persona hace crisis de pánico, manifiesta que se siente morir o que se vuelve loco, es fundamental que la familia o los amigos la lleven al centro de Salud más cercano para que un profesional de la salud mental pueda evaluarla y diagnosticarla”, recomendó el especialista.

Indicó que si la persona necesita tratamiento puede acudir al único Programa de Adicciones del país en el Instituto Especializado de Salud Mental Honorio Delgado, centro que atendió y rehabilitó, desde su creación, a más de 500 pacientes en diversas adicciones.