Estrés afecta a más del 30% de limeños

Nota de prensa

15 de setiembre de 2004 - 12:00 a. m.

El 30% de la población de Lima y Callao, es decir tres de cada diez personas, tiene un alto nivel de tensión o estrés, causado –principalmente- por problemas económicos, de salud, trabajo, los estudios, la familia o la pareja; señaló el Dr. Javier Saavedra Castillo, psiquiatra del Instituto Especializado de Salud Mental Honorio Delgado - Hideyo Noguchi del Ministerio de Salud (MINSA).

El experto reveló también que dos de cada diez personas sufren de estrés debido a la contaminación ambiental, los ruidos excesivos, malos olores, falta de ventilación y de espacio de vivienda o hacinamiento.

Además, indicó que de acuerdo a un estudio epidemiológico realizado en Lima y Callao por dicha institución, el 50% de las mujeres encuestadas, expresó tener estrés vinculado con sentimientos anímicos negativos como la tensión, angustia, tristeza, irritabilidad y aburrimiento.

Explicó que estos datos son los resultados de una encuesta que realizada en base a la visita a dos mil 418 hogares.

“El estrés no es una enfermedad, pero puede tornarse en un trastorno mental cuando la persona estresada empieza a desarrollar cuadros de ansiedad y de depresión”, indicó el psiquiatra del MINSA tras señalar que en estos casos se requiere de tratamiento especializado y algunas veces medicación.

Para evitar el estrés el psiquiatra aconsejó a la población organizar mejor su trabajo, desarrollar una vida familiar y amical, practicar deporte, escuchar música, conversar con los amigos, salir a divertirse o relajarse, pues a través de estos consejos se evitará que el estrés complique la vida de las personas.

Reveló que los síntomas para detectarlo son el nerviosismo y cierta tensión emocional, que luego se reflejan en problemas físicos como dolores de cabeza, espalda, dolencias de digestión como la gastritis, insomnio, ansiedad, e irritabilidad.

Estos cuadros pueden complicarse con cambios de comportamiento como sobrealimentación o inapetencia, mayor consumo de alcohol o drogas, aumento del tabaquismo, rendimiento deficiente en el trabajo, entre otros cambios que en estos casos, es necesario acudir por ayuda especializada.