Comida chatarra está causando obesidad y enfermedades crónicas en la población
Nota de prensa
2 de octubre de 2004 - 12:00 a. m.
Especialistas del Centro Nacional de Nutrición (CENAN) del Ministerio de Salud (MINSA) alertaron que el excesivo consumo de la “comida chatarra”, combinada con la falta de actividad física en la población, está causando el incremento de sobrepeso, obesidad, y otras enfermedades como la hipertensión arterial, diabetes y el cáncer, especialmente de colon.
“Se puede considerar en este rubro a las populares salchipapas, pollo a la brasa, hamburguesas con abundantes cremas y papas al hilo o embutidos, todos ellos acompañados de gaseosas”, detallaron.
Según explicaron, ingerir de 2 a 3 veces por semana estos platos rápidos (frituras), con buen sabor (muy condimentado), con exceso de calorías, grasas (aceites saturados), sal y carentes de alimentos nutritivos (sin hierro, calcio, vitaminas A, C y fibra), está produciendo a largo plazo la presencia de las citadas enfermedades también conocidas como no transmisibles.
Sin embargo –puntualizaron- si solo se consume “comida chatarra” una vez a la semana y se desarrollan hábitos saludables como la práctica de ejercicios e ingesta de comidas acompañadas de verduras y frutas, es posible reducir el mínimo el riesgo de enfermedades.
Recomendaron por ello sustituir los alimentos grasos con porciones de vegetales, los dulces o chocolates por frutas, las gaseosas por jugos de frutas de estación y evitar comer papitas fritas, pues cada vez es más común incluirlas en las loncheras por su rapidez al prepararlas.
Los especialistas del CENAN aconsejaron reemplazar las hamburguesas "gigantes", las papas fritas y los panchos (hot dog), por hamburguesas normales, sin condimentos ni salsa a base de aceite (mayonesa o tártara). Explicaron que una hamburguesa simple de 100 gramos proporciona más de 240 kilocalorías, pero si le agregan mayonesa, ají u otra salsa que tiene aceite y un pan se consumirá más de 400 kilocalorías.
En el caso de los niños, indicaron, es fundamental que los padres no los acostumbren a comer "chatarra" como lo son las frituras, gaseosas o golosinas, sino darles jugos y frutas entre cada comida.
En los adolescentes y las personas adultas se debe incluir en su alimentación cereales (arroz, trigo, quinua, etc); leguminosas (frijoles, lentejas, arverjas secas); tubérculos y raíces (papa, camote, yuca); carnes y vísceras; lácteos (leche, yogurt, queso); verduras y frutas, así como grasa y azúcar simple con moderación, detallaron.
Pollos a la brasa
En el caso de los pollos a la brasa, los expertos del CENAN recomiendan que las pollerías cambien la forma de presentar este producto. En lo posible, ofrecer el pollo sin piel, con abundante ensalada sazonada con aceite de oliva, limón y poca sal; con pocas papás fritas y con un mínimo de sal, acompañada de un jugo de frutas de estación o una limonada.
De este modo, consideraron, se cambiaría el hábito alimenticio especialmente de la población que reside en las zonas urbanas.
“En Estados Unidos se han tomado radicales medidas para disminuir la venta de comida chatarra en las grandes cadenas de comida rápida obligándolas a ofrecer más ensaladas y menos frituras, debido a que el 50% de su población sufre de obesidad”, comentaron.