Más de 46 mil personas fueron mordidas por animales y estuvieron expuestas al contagio de rabia

Nota de prensa

25 de abril de 2005 - 12:00 a. m.

Los accidentes por mordeduras de animales a personas se han incrementado durante los últimos años en tal magnitud que estos incidentes son considerados como un problema de salud pública, debido a que representan el riesgo de transmisión de rabia a personas.

Durante el año 2004 un total de 46 mil 704 personas fueron mordidas por diversos tipos de animales y estuvieron expuestas al contagio de la rabia, según indicó la Dra. Ana María Navarro, responsable del componente de Prevención y Control de Zoonosis de la Dirección General de Salud de las Personas, del Ministerio de Salud (Minsa).

Agregó que las regiones donde se han confirmado casos de rabia entre el 2004 y este año son Puno, La Libertad, Ayacucho, Piura, Apurímac, Cusco, San Martín, Huanuco, Madre de Dios, Lambayeque, Amazonas, Lima y Callao.

Frente a esta situación y como una estrategia de control, el Minsa promueve el desarrollo de un marco normativo para la tenencia responsable de mascotas. Sin embargo, el riesgo se incrementa debido a que muchas personas tienen en casa animales exóticos.

Esta situación será expuesta mañana en el taller de capacitación para periodistas “La rabia como un problema de salud pública”, que se realizará de 8:45 ama. a 11:00 a.m., en el Ministerio de Salud, con participación de especialistas de la Dirección General de Salud de las Personas, la Oficina General de Epidemiología, el Centro Antirrábico y el Instituto de Salud del Niño.

Animales exóticos

El Comité de emergencia por rabia del Minsa reiteró a la población la recomendación para no criar animales silvestres como mascotas, ya que ellos constituyen un riesgo para la salud de las personas porque pueden transmitir diversas enfermedades.

Los animales silvestres, por ejemplo monos, loros, boas y koalas, pueden transmitir a las personas muchas patologías como rabia y males desconocidos, advirtieron los especialistas.

Señalaron que no se conoce qué enfermedades pueden tener estos animales en su hábitat, ni los períodos en que los virus ingresan a su organismo.

Los monos llamados “leoncito” (los más pequeñitos), por ejemplo, pueden ser animales dóciles y juguetones pero de pronto, de un día para otro, pueden convertirse en agresivos o deprimidos. El cambio puede ocurrir debido a una enfermedad que desconocemos y que puede significar un grave peligro para la salud de las personas que lo crían.

Los especialistas del Minsa enfatizaron que no existen vacunas para estos animales y, por tanto, resulta inútil tratar de inmunizar a un mono o cualquier otro animal exótico contra males como la rabia.

Por ello la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda no tener animales silvestres en los hogares, sugerencia que también es difundida por el Minsa entre nuestra población.

Recomendación

Asimismo, hicieron un llamado a las personas que tienen animales silvestres en sus casas para que los entreguen al Ministerio de Agricultura, ya que estas especies representan un grave peligro para la salud de las personas.

Para ello, deben comunicarse con el Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena), a los teléfonos 460-0873 y 224-3298, anexo 204 ó dirigirse al jirón Huamachuco 1833, Jesús María.

Además, si una persona se ha expuesto y ha sido mordida por uno de estos animales lo primero que debe hacer es acudir al centro de salud más cercano para recibir tratamiento antirrábico y protegerse así del virus de la rabia.

Por su parte, los profesionales veterinarios deben reportar ante la autoridad sanitaria la atención que brindan a animales silvestres, más aún si éstos mueren y previamente estuvieron en contacto con personas.

Muchas veces los propietarios de mascotas acuden ante los veterinarios para vacunarlos o curarlos, pero ninguno asegura una protección para la salud de las personas que viven con el animal. Además los veterinarios que lo atiende se exponen a ser mordidos y contagiados de alguna enfermedad conocida, como la rabia, o cualquier otra desconocida.

Para tener en cuenta:
- Toda persona mordida por algún animal silvestre deben ser vacunada contra la rabia de inmediato.
- La vacunación consta de siete dosis. Se aplica una diaria.
- Además se aplican tres dosis de refuerzo. La primera 10 días después de la última dosis; la segunda a los 20 días y la última a los 90 días.
- La vacuna se aplica alrededor del ombligo.