Más de 130 personas se han suicidado en el transcurso del presente año

El suicidio sigue siendo un grave problema de salud mental en el país, debido a que aumentan las cifras de víctimas registrándose en el transcurso del presente año 132 decesos, 21 casos en niños y adolescentes. Sin embargo esta situación puede revertirse si se despliegan esfuerzos que involucren a la familia, a la comunidad, a las escuelas, a los medios de comunicación y a los servicios de atención especializados.

Así lo dio a conocer el Dr. Sergio Pérez Barrero, presidente y fundador de la Sección de Suicidiología de la Sociedad Cubana y de la Asociación Mundial de Psiquiatría, quien indicó que muchas veces estas crisis se han dado por imitación y mayormente por la influencia que ejerce la difusión de estas noticias en la población de riesgo.

Durante un taller para periodistas organizado por la Oficina General de Comunicaciones del Ministerio de Salud (Minsa), el especialista indicó que tanto la familia como los medios de comunicación son imprescindibles en la prevención del suicidio, y rechazó que la intención de quitarse la vida ocurra por impulso, sino por el contrario esta idea se va maquinando en el trascurso de los días, meses y hasta años.

En este sentido, dijo que nueve de cada diez personas que se han autoeliminado expresaron claramente sus propósitos a través de amenazas, palabras, gestos o cambios de conducta, mientras que el resto dio a entender de manera indirecta estas intenciones.

Afirmó que más del 92% de suicidas ha padecido de alguna enfermedad mental, fundamentalmente depresión, y el porcentaje restante (8%) ha tenido síntomas de síndrome depresivo, cuadro que puede ser superado mediante la atención de los padres, de los maestros y amigos.

“Aunque toda persona deprimida tiene posibilidades de realizar un intento de suicidio, no todos los que se autoeliminan presentan este desajuste, sino pueden padecer de esquizofrenias, alcoholismo o trastornos del carácter; pero los enfermos mentales se suicidan con mayor frecuencia que la población en general”, dijo al precisar que es un mito creer que el suicidio no puede prevenirse.

A su turno, el director general del Instituto Especializado de Salud Mental (IESM) “Honorio Delgado- Hideyo Noguchi”, el Dr. Martín Nizama Valladolid, expresó su preocupación debido a que el suicidio en niños y adolescentes registra en estos momentos el pico más alto.

Cerca de 21 personas que se han suicidado pertenecen a esta población. Es decir el 16% de las autoeliminaciones en estos últimos cinco meses han sido en menores de 18 años. Tres puntos porcentuales más que los casos registrados en el 2004.

Los reporte dan cuenta que el 76,2% de los suicidas son adolescentes de entre 15 y 17 años, el 19% de 12 a 14 y el 4,8% de los que se quitaron la vida en estos primeros meses son escolares de entre 9 y 11 años.

Asimismo, el Dr. Freddy Vásquez, jefe del Programa de Prevención del Suicidio del IESM afirmó que en el último registro de este año, también se observa un ligero incremento de mujeres en relación a los varones (Once niñas y adolescentes se quitaron la vida frente a 10 varones de la misma edad).

Informó que el rango del suicidio oscila entre los 9 y 89 años de edad y que en el transcurso del año se registraron 84 autoeliminaciones de varones (63,6%), frente a 48 mujeres (36,4%).

Según el reporte el método utilizado por el 76,2% de suicidas es el ahorcamiento, mientras que un 9.5% se envenenó y otra cantidad igual se disparó con arma de fuego; sólo el 4,8% se lanzó al vacío.

El médico psiquiatra precisó que una de las mejores formas de prevenir un suicidio es detectar a tiempo los cuadros de depresión, a través de la comunicación entre padres e hijos. Indicó que el 75% de personas que se han autoeliminado han sufrido de trastornos depresivos de fondo.