Maltrato infantil obedece a baja autoestima y aislamiento de padres

Nota de prensa

19 de octubre de 2005 - 12:00 a. m.

Los especialistas del Ministerio de Salud (Minsa) recomiendan a los padres tolerar el comportamiento de sus hijos y cumplir con su rol formador sin recurrir a los castigos físicos o a la violencia, a fin de evitar las consecuencias del maltrato infantil que pueden ser muy negativas en el desarrollo del menor porque pueden crearle problemas en sus relaciones sociales e incluso conducir al suicidio.

Así lo afirmó el Dr. Rolando Pomalima Rodriguez, sub jefe de la Dirección Ejecutiva de Niños y Adolescentes del Instituto Especializado de Salud Mental (IESM) “Honorio Delgado – Hideyo Noguchi”, quien indicó que los progenitores que maltratan físicamente a sus hijos carecen de algún tipo de control en sus emociones y mantienen creencias distorsionadas o mitos acerca de la supuesta importancia de mantener una disciplina dura y rigurosa.

Señaló que los padres y madres que usan la violencia contra sus hijos son personas que viven aisladas de otros familiares, evitan contactos sociales, tienen muy poca comunicación y falta de afecto hacia sus hijos. Asimismo, presentan modelos de crianza autoritarios, con frecuentes expresiones inapropiadas de ira o ataques de cólera.

“Los padres suelen estar muy estresados y no manejan adecuadamente su ansiedad; tienen poca tolerancia a la frustración y perciben la conducta del niño como estresante, y fracasan en la utilización de métodos disciplinarios para corregir las conductas inapropiadas de sus hijos excediéndose en el castigo”, dijo.

A su entender las personas que usan la violencia probablemente en épocas pasadas hayan tenido experiencias de sucesos violentos y traumáticos o una historia de maltrato, luego de precisar que otro problema del maltrato infantil es el desempleo, los conflictos coyungales y el estrés laboral.

Estudio

Según el Estudio Epidemiológico de Salud Mental que realizó el IESM, el 30,2% de las personas que viven en Lima y Callao tiende a desarrollar actos o conductas violentas. El 43% de varones y el 18.2% de mujeres muestra este comportamiento. En la región de la sierra el 38,2% de varones golpea a los niños, al igual que el 17,5% de mujeres.

Ante esta realidad, el psiquiatra indicó que en la primera infancia el amor de los padres es fundamental para la salud mental y de esto dependerá el desarrollo psicológico del menor, porque si hay violencia en la niñez esta empieza a dar sus frutos en la adolescencia y se convierten en parte inseparable del carácter de la persona adulta.

Asimismo, Pomalima Rodríguez dijo que las consecuencias del maltrato infantil pueden ser graves y podría causar problemas en el desarrollo de sus relaciones de vínculo o confianza con el entorno familiar, educativo y su comunidad, baja autoestima, inadecuado autocontrol de sus relaciones interpersonales, agresividad, aislamiento y hasta presencia de conductas antisociales.

“Los castigos pueden traer como consecuencia problemas de ansiedad, sueño, tics nerviosos, tartamudez, trastornos por estrés postraumáticos, depresivos y hasta intentos de suicidio”, finalizó.