En últimos años se incrementan quemaduras y mutilaciones por juegos pirotécnicos

Nota de prensa

10 de diciembre de 2005 - 12:00 a. m.

Quemaduras, contusiones, fracturas, amputaciones, lesiones oculares y auditivas, son las consecuencias que genera la manipulación de juegos pirotécnicos en niños, particularmente en aquellos de 10 y 14 años, puesto que el 60% de casos se produce en esta edad, según informó la Dra. Marga Callupe Gamarra, cirujano plástico del Instituto Especializado de Salud del Niño (IESN), del Ministerio de Salud (Minsa).

Indicó que en los meses de noviembre, diciembre y enero se presentan la mayoría de casos. Así en el 2003 dicho nosocomio recibió cuatro casos de niños con quemaduras por artefactos explosivos, mientras que el año siguiente se registraron 9 víctimas y en lo que va del 2005 ya se han registrado cuatro menores afectados por estos productos.

Señaló que el 90% de lesiones en menores se produce en las partes blandas como piel, músculos, tendones y vasos, de los miembros superiores. “Lo más preocupante de estas consecuencias son las amputaciones totales o parciales, así como la ruptura del tímpano, lesiones graves en los ojos y las quemaduras”, señaló.

Exhortó a los padres de familia a supervisar a sus hijos y no dejarlos jugar con artefactos pirotécnicos, puesto que en el peor de los casos estos productos les podrían causar la muerte, si es que el menor no es atendido a tiempo en un establecimiento de salud.

Invocó a los padres y a los profesores a crear mayor concienciar en los niños a través de charlas educativas sobre las secuelas que causa un juego pirotécnico.

Asimismo, invocó a los comerciantes tener en cuenta que con la venta de estos productos hacen un gran daño a la sociedad, pues su comercialización está prohibida porque pueden herir o matar a una persona, e incluso origina una chispa que puede generar un incendio de grandes proporciones, como el ocurrido en el año 2000 en el centro de Lima que cobró miles de pérdidas humanas y económicas.

Más casos

Por su parte, el Dr. Jorge Moscol, director del Hospital de Emergencia Casimiro Ulloa, informó que en el 2004 su establecimiento recibió a cuatro pacientes víctimas de juegos pirotécnicos, mientras que en lo que va de este año ya se ha registrado cinco casos de personas quemadas por estos productos, incluso también hay pacientes que han quedado mutilados.

El especialista del Minsa expresó que el daño más común entre las víctimas es perder un dedo o la mano parcialmente, el cual no solo genera daños a la salud física sino también mental.

Precisó que es muy probable que exista un aumento de casos a finales del 2005, porque el uso de juegos pirotécnicos ha aumentado en este año, al igual que la comercialización. Por tanto, invocó a los comerciantes a cumplir la ley y dejar de vender estos artefactos, ya que las víctimas podrían ser hasta sus propios hijos o familiares.