Detección precoz de complicaciones en gestantes reduce mortalidad materna y perinatal
Nota de prensa
8 de febrero de 2006 - 12:00 a. m.
La detección oportuna de las complicaciones durante el embarazo, parto y puerperio, reduce la mortalidad materna y perinatal, y esta detección precoz es uno de los principales objetivos del Hospital Nacional Docente Madre-Niño San Bartolomé del Ministerio de Salud (Minsa), que en los últimos años ha logrado disminuir en forma notoria las muertes en madres y recién nacidos.
Así lo dio a conocer el Dr. Santiago Cabrera Ramos, director de dicho establecimiento de salud, quien afirmó que los casos de mortalidad materna se han reducido a 14 por cada 100 mil nacidos vivos, mientras que la mortalidad perinatal bajó a 10 por cada 1,000 nacidos vivos, indicadores que representan un gran avance en la prevención de la muerte de la madre y el bebe.
Explicó que actualmente existen notorios avances tecnológicos que permiten evaluar en forma oportuna a la gestante, tales como los ecógrafos doppler a color que ofrecen la posibilidad de detectar precozmente cualquier signo de sufrimiento fetal desde el vientre materno, así como también las pruebas de monitoreo electrónico fetal (similar a un electrocardiograma) que establecen el movimiento del feto y los latidos del corazón.
Otra prueba muy utilizada es el perfil biofísico fetal, que establece parámetros del feto para así determinar su desarrollo neurológico, movimientos corporales de la mano y los brazos, movimientos oculares, deglución del líquido amniótico, madurez de la placenta, etc.
Detalló que entre los principales riesgos que amenazan el embarazo se encuentran las hemorragias, las infecciones urinarias y la preeclampsia. Sin embargo destacó que estas complicaciones podrían prevenirse con una temprana visita al especialista.
Factores de riesgo
Aseguró que la atención prenatal es fundamental para reducir los casos de mortalidad materna y perinatal. “La asistencia periódica a consultas permite detectar factores de riesgo en gestantes, ya sea conociendo antecedentes de enfermedades, partos anteriores, presión arterial, anemia o características físicas que permiten inclusive predecir si el parto será vía vaginal o por cesárea”.
Cada vez que una embarazada acude a consulta recibe un doble beneficio. Durante el control se cuida la salud de la madre y el futuro bebé a través de procedimientos como las ecografías de control, los análisis, las pruebas de hemoglobina y exámenes, con el fin de prevenir infecciones urinarias, el peso, tensión arterial, entre otros problemas.
La atención prenatal debe acompañarse con una orientación nutricional. Por ejemplo, es recomendable que las gestantes consuman suplementos de ácido fólico desde el inicio del embarazo y también reservas de hierro a partir de la mitad de la gestación.
Signos de alarma
El especialista indicó que cuando una gestante presenta alguno signos que a continuación se enumeran, debe acudir de inmediato al establecimiento de salud:
- Vómitos en forma exagerada.
- Hinchazón de pies, manos o cara.
- Fiebre.
- Dolores intensos de cabeza, zumbidos en el oído o vista borrosa.
- Pérdida de líquido o sangre por vía vaginal o los genitales.
- Contracciones o dolores fuertes antes de los ocho meses y medio.
- Dolores o ausencia de movimientos fetales.
- Palidez marcada.
- Aumento de más de dos kilos por semana.
Adecuada nutrición
Asimismo, el especialista precisó que una adecuada nutrición se logra a través de una dieta balanceada, es decir el equilibrio de proteínas, carbohidratos y grasas. A continuación algunas recomendaciones:
- Ingerir menestras como lentejas y frijoles.
- Consumir diariamente pescado, pollo o alguna carne.
- Tomar leche y sus derivados ricos en calcio.
- Comer verduras y frutas.
- Tomar agua y jugo de frutas.
Además se deben evitar las comidas con abundantes aderezos y ají, las bebidas alcohólicas y el cigarro.