Alto porcentaje de casos de diarrea es ocasionado por inadecuados hábitos de higiene

El factor fundamental que determina las enfermedades diarreicas agudas (EDAs) está directamente relacionado con los inadecuados hábitos de higiene, es decir ocurren por la falta de lavado de manos con agua y jabón, por la incorrecta manipulación y conservación de alimentos, así como por el consumo de comestibles en proceso de descomposición.

Así lo advirtió la Dra. Rosa Vilca Bengoa, miembro del equipo técnico de la Dirección Ejecutiva de Atención Integral de Salud del Minsa, quien dijo que ante el incremento de la temperatura la población debe ser más cuidadosa con los alimentos que consume diariamente, ya que estos deben ser preferentemente frescos y no refrigerados.

Refirió que un alto porcentaje de casos de diarreas durante la temporada de verano se presenta por los inadecuados hábitos de higiene. Estos cuadros constituyen el segundo motivo de consulta general en niños, y en los más pequeños los episodios diarreicos pueden complicarse con deshidratación, que incluso puede ser mortal.

Es importante asegurar la pureza del agua para beber, la cual debe estar hervida o clorada. Además, los alimentos como frutas y verduras deben ser lavados y desinfectados antes de ser consumidos. Lo recomendable es usar una cucharadita de lejía por litro de agua y enjuagar con agua a chorro las verduras, frutas y utensilios de cocina.

Asimismo, se recomienda lavarse las manos con agua y jabón antes de cada comida, al momento de preparar los alimentos y luego de acudir a los servicios higiénicos.

Señaló que para la preparación de alimentos debe usarse agua potable y si se utiliza agua de cisterna debe desinfectarse con dos gotitas de lejía por litro.

Conservación de alimentos

Mientras tanto, la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) recomienda a la población almacenar adecuadamente los alimentos con el objetivo de prevenir algunas enfermedades trasmitidas por comestibles en mal estado.

Precisó que en época veraniega las carnes, pescados, mariscos, vísceras, embutidos, productos lácteos, hortalizas y frutas deben permanecer refrigerados, y una vez descongelados deberá usarse en el día. Los alimentos que no requieren de refrigeración, tienen que mantenerse en ambientes limpios y ventilados.

Los alimentos sobrantes y que van a ser consumidos en horas posteriores deben ser puestos en refrigeración luego de 30 minutos de haber sido cocinados, a fin de evitar la presencia de factores que lo descompongan.

Asimismo, antes de elegir un local para consumir alimentos debemos tener en cuenta la higiene y limpieza del local, del personal y de los alimentos que se expenden.

Los especialistas del Minsa recomiendan evitar el consumo de preparaciones de riesgo, tales como cebiche, papa a la huancaína, ají y mayonesa en restaurantes de poca confianza. Estos platos deben consumirse inmediatamente después de su preparación y de preferencia deben ser elaborados en el hogar-.

Por otro lado, se recomienda que los servicios higiénicos permanezcan limpios, en buen estado de conservación, alejados de la cocina y cuenten con las facilidades para el lavado de manos y disponga de recipientes para deshechos con tapa y bolsa plástica.