Productores de harina de trigo cumplen con fortificación de este producto

Nota de prensa

12 de setiembre de 2006 - 12:00 a. m.

El Centro Nacional de Nutrición y Alimentación (CENAN) del Ministerio de Salud (Minsa) informa que las 24 plantas de harina de trigo de nuestro país, 13 de las cuales están ubicadas en Lima y 11 en provincias, cumplen con la adición de micronutrientes a sus productos, tal como manda la Ley Nº 28314 que dispone la fortificación de la harina.

El Ing. César Legua Castilla, jefe de la División de Inspección y Muestreo del CENAN, dijo que esta institución en su calidad de responsable del control de la fortificación de la harina de trigo, ha realizado las acciones de supervisión y control en dichas plantas, las cuales han demostrado el cumplimiento de la mencionada ley que dispone adicionar hierro (55 mg/kg), tiamina o vitamina B1 (5mg/kg), riboflavina o vitamina B2 (4mg/kg), niacina (48mg/kg) y ácido fólico (1.2mg/kg).

La adición de los mencionados micronutrientes tiene diversos beneficios para la salud de las personas. Así, la tiamina promueve el apetito y normaliza las funciones del sistema nervioso; la riboflavina es importante para la vista y la piel; la niacina es útil para la piel, los nervios y los órganos que intervienen en la digestión; el ácido fólico promueve el metabolismo de las proteínas y la formación de glóbulos rojos, mientras que el hierro interviene en el funcionamiento de la respiración y sirve para formar la hemoglobina.

La fortificación de este producto tiene como objetivo prevenir o corregir las deficiencias de los mencionados nutrientes en la población, a fin de evitar problemas de salud como la anemia y las malformaciones congénitas por defectos del tubo neural, entre ellas la espina bífida y la anencefalia.

La principal causa de anemia en nuestro país, especialmente en mujeres embarazadas y niños menores de tres años, es la deficiencia de hierro, ácido fólico y vitaminas del complejo B, en la alimentación diaria. Ante esta realidad se determinó que la mejor manera de combatir este problema es la fortificación de la harina de trigo por ser un insumo utilizado en la elaboración de productos de consumo masivo como pan, galletas y fideos.

De esta manera nuestro país busca disponer de estos micronutrientes a través del consumo de alimentos de gran demanda, los cuales no han sufrido variación de costos, toda vez que el proceso de fortificación de la harina es mínimo (2 dólares más IGV por cada tonelada de harina). En el Perú durante años sólo se adicionaba hierro a la harina de trigo, mientras que en la actualidad el país se coloca a la par de casi la totalidad de los países de Latinoamérica.