En Instituto de Oftalmología se atendieron más de 2 mil casos de conjuntivitis
Nota de prensa
2 de enero de 2007 - 12:00 a. m.
La conjuntivitis es una enfermedad oftalmológica que se presenta con mayor frecuencia durante la época de verano, y según informó el Instituto Nacional de Oftalmología (INO) en lo que va de este año se atendieron por consulta general 2 mil 148 casos de conjuntivitis.
Por ello, especialistas del INO invocaron a la población en general a mantener las medidas de higiene adecuadas a fin de no contraer la conjuntivitis, que es una patología que se presenta con mayor frecuencia en los primeros meses del año, debido a un aumento en la proliferación de microorganismos (virus, bacterias y hongos) en el medio ambiente.
Síntomas
La conjuntivitis es la inflamación de la membrana transparente que recubre el ojo, específicamente la parte blanca del globo ocular y la porción interna de los párpados.
Los síntomas de esta enfermedad son la sensación de tener arena en los ojos, rechazo a la luz (fotofobia), picazón y dolor, enrojecimiento de los ojos, hinchazón de los párpados, lagrimeo y presencia de legaña blanquecina. Algunas veces se presentan hemorragias a nivel de la conjuntiva del globo ocular como resultado de una reacción inflamatoria.
Existen dos tipos de conjuntivitis: virales y bacterianas. Las primeras tienen una duración de siete a catorce días y presentan enrojecimiento de los ojos, lagrimeo y presencia de legaña blanquecina. En cambio las bacterianas presentan inflamación y presencia de legaña amarillenta o verdosa, y en algunas ocasiones la infección puede comprometer los párpados y otras estructuras oculares.
Cómo prevenir la conjuntivitis
A fin de prevenir esta enfermedad se recomienda a la población en general lavarse las manos y la cara con abundante agua y jabón por lo menos tres veces al día, usar lentes para natación cuando acudan a la piscina para evitar la conjuntivitis alérgica por cloro y los virus que viven en las aguas de las piscinas.
También se debe evitar la automedicación, no compartir cosméticos con otra persona y no acudir a lugares donde existan personas que están desarrollando la enfermedad. Tampoco se deben usar frascos con gotas oftálmicas sin uso durante largo tiempo.
Asimismo, para evitar que se propague esta enfermedad las personas afectadas deben lavarse las manos con jabón frecuentemente, evitar tocarse y frotarse el ojo infectado, limpiarse las secreciones de los ojos dos veces al día con toallas descartables, lavar las toallas faciales y ropa separada del resto de la familia, evitar el uso de lentes de contacto y maquillaje hasta que desaparezca el enrojecimiento.