Casos de tiña en niños suelen aumentar en el verano por incremento de calor y humedad
Nota de prensa
28 de enero de 2007 - 12:00 a. m.
Especialistas del Hospital Nacional Dos de Mayo del Ministerio de Salud (Minsa) advirtieron que los casos de “tiña capitis” (hongos que se localizan en la cabeza) suelen incrementarse en el verano debido a la humedad y el calor, particularmente en los niños, pues a diferencia de los adolescentes y adultos, el cuero cabelludo presenta menos cantidad de ácidos grasos saturados, lo cual constituye un medio hostil para los hongos.
Según explico la dermatóloga Lucía Bobbio Fujishima, las consultas por esta causa aumentan en el verano y advirtió que, de no tratarse adecuadamente, esta enfermedad avanza y se puede propalar a otros niños.
Detalló que este tipo de hongos (dermatophitos) tienen afinidad por estructura que contiene una proteína llamada queratina que forma parte de la piel, pelo y uñas. Causa lesiones en forma de placas redondeadas con caída de cabellos, o cabellos rotos, grises y deslustrados, abundante descamación y escozor intenso.
La especialista indicó que para combatir la tiña no se deben emplear tratamientos caseros, pues son ineficaces, ni aplicar nada tópico como las cremas, pues el hongo se localiza en la vaina externa del tallo piloso y hasta ahí no penetra nada por vía tópica.
Lo mejor en estos casos es un tratamiento que incluya antimicóticos por vía oral, medicación que debe ser prescrita por un médico, y que debe ser administrada por un lapso de ocho semanas, aproximadamente.
Contagio
Bobbio Fujishima subrayó que el contagio de la tiña es por contacto directo con otros niños enfermos, mascotas contaminadas como perros, gatos, conejo o hamster, así como por compartir prendas personales como peines, cepillos, sombreros, almohadas, etc. o por contacto con tierra contaminada.
Precisó del mismo modo que los malos hábitos higiénicos, hacinamiento y la desnutrición, son factores que condicionan que se empeoren las lesiones.
Para prevenir la tiña consideró necesario guardar las normas adecuadas de higiene como el baño diario, que incluya el lavado del cabello, evitar compartir prendas personales, mantener el cuidado apropiado de las mascotas en casa y evitar que los niños jueguen en la tierra.