Niños menores de seis años pueden presentar fluorosis
Nota de prensa
12 de mayo de 2007 - 12:00 a. m.
Si bien es cierto que el uso de dentífricos que contienen flúor es importante para el cuidado y prevención de los dientes, en el caso de los niños se debe poner especial atención, pues el uso inadecuado de estos productos en menores de seis años de edad, influye y está muy relacionado con el riesgo de presentar fluorosis dental.
Así lo indicó el Dr. Pedro Villavicencio, coordinador nacional del Componente de Salud Bucal del Ministerio de Salud (Minsa), quien señaló que el flúor es el medio más eficaz para prevenir la caries, pero su consumo excesivo o inadecuado mientras los dientes están en desarrollo puede originar fluorosis.
Señaló que los efectos positivos que se adquieren con los dentífricos fluorados se logran con el uso frecuente y tópico de los mismos, pero si el producto es ingerido diariamente en dosis no recomendables se convierte en un riesgo de fluorosis en los niños que lo consumen de manera incorrecta durante los primeros seis años de vida.
En ese sentido, el especialista dijo que en menores de seis años la higiene bucal debe ser con pastas dentífricas pediátricas prescritas por el odontólogo y con la supervisión de una persona adulta.
Por ello, recomendó a los padres de familia emplear pastas dentífricas pediátricas con concentraciones de flúor entre 250 y 550 ppm (partes por millón) en pequeñas cantidades.
Al mismo tiempo, destacó que en el caso de menores de dos años se debe tener mayor cuidado, puesto que los niños de esta edad no están en capacidad de expeler la pasta dental, por lo que la fluorosis puede presentarse con mayor severidad.
Efectos
La fluorosis cambia la estructura y apariencia del esmalte dental pudiéndose observar en los dientes líneas blancas, manchas marrones o poros dependiendo de la severidad de este problema bucal.
Estudios científicos han demostrado que el flúor reduce la prevalencia e incidencia de las caries, debido a que interfiere en el desarrollo de la lesión cariosa al disminuir la desmineralización cuando existe exposición a los ácidos emitidos por las bacterias bucales y a la vez reduce la acidez de la placa dental. Su efecto preventivo se da siempre y cuando el flúor se mantiene en niveles bajos y constantes en la cavidad bucal.