En mercados de Lima detectan juguetes con alta cantidad de plomo

Nota de prensa

30 de octubre de 2007 - 12:00 a. m.

La Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) presentó hoy los resultados del análisis hechos a 12 juguetes incautados en diversos mercados de Lima, encontrando en ellos una alta cantidad de plomo y cromo, en niveles más altos de lo permitido, lo cual representa un riesgo para la salud de los niños.

Segundo Roncal, director ejecutivo de Ecología y Protección al Ambiente de Digesa, precisó que algunos artículos estudiados contienen hasta 13 veces más de la cantidad de plomo de lo permitido.

Se descubrió que un pequeño jeep (que se vendía sin ninguna marca y sólo en una bolsa plástica) contiene en la superficie pintada de verde 1,175 mg/kg de plomo cuando el máximo nivel permitido para que no sea dañino a la salud es de 90 mg/kg.

La pintura verde con la que fue pintado el carrito contiene 231 mg/kg de cromo, es decir, cerca de cuatro veces más del nivel permitido que es de 60 mg/kg. Además, la cantidad de plomo encontrado en la superficie negra del juguete llega a 331 mg/kg, lo que representa más de tres veces de la cantidad permitida.

Igualmente, en el análisis practicado a un juguete en forma de pajarito se halló en su superficie roja 100.89 mg/kg de plomo, cifra superior al estándar permisible.

El funcionario comentó que juguetes con estas características se convierten en un alto riesgo, por lo que recomendó a los padres de familia no comprar objetos que tengan procedencia dudosa.

Asimismo alertó a los padres para que desconfíen de los juguetes muy baratos porque éstos probablemente sean de fabricación informal en la que se usan sustancias sin ningún control.

Llamó también la atención sobre los artículos con colores muy llamativos, pues éstos son los que contienen en su pigmentación la mayor cantidad de metales pesados como plomo, cromo y cadmio.

Por su parte, la directora del laboratorio de Digesa, Soledad Osorio, explicó que metales pesados como el plomo provocan en los niños anemia, cansancio, falta de concentración, disminución en la capacidad de aprendizaje y en su fase más crítica, cólicos que pueden confundirse con apendicitis.

En tanto que el cromo es una sustancia altamente tóxica y cancerígena y el cadmio puede favorecer la osteoporosis y la carencia de esmalte en los dientes.