Lima, Callao, Loreto y Arequipa presentaron mayores consultas atendidas de asma

Durante los tres primeros meses del año 2009, las regiones de Lima, Callao, Loreto y Arequipa presentaron el mayor número de consultas atendidas por asma y obstrucción bronquial, en los diferentes puestos y establecimientos del Ministerio de Salud (Minsa), casos originados por las condiciones climatológicas, contaminación del aire, humo del tabaco y exposición a alérgenos como pelaje de mascotas, entre otros.

Según las estadísticas reportadas, en lo que va del año más de 17 mil 700 niños se atendieron en Lima, provenientes en su mayoría de las jurisdicciones de Comas, Independencia, San Martín de Porres y San Juan de Lurigancho. En tanto, a nivel de regiones, en La Libertad se registraron más de 3 mil 300 casos, seguida de Loreto con mil 372 y Arequipa con 969 casos.

La Dra. Rosa Vilca Bengoa, miembro del equipo técnico de la Dirección Ejecutiva de Atención Integral de Salud del Minsa, resaltó la importancia de identificar a tiempo los síntomas del asma, a fin de que un médico especialista realice el control adecuado.

Uno de los síntomas en el niño es cuando éste tiene menos energía que sus compañeros o intenta evitar ciertas actividades que le producen tos. Es allí cuando debemos acudir a un especialista para que realice un diagnóstico diferencial, precisó Vilca Bengoa.

También hay que tener en cuenta la importancia de evitar la exposición de los niños a factores desencadenantes del trastorno, como el humo del tabaco, el polvo, o pelaje de animales y mascotas domésticas.

Por su lado, el psiquiatra Manuel Escalante, de la Estrategia de Salud Mental, refiere que son diversos los factores emocionales como estrés, ansiedad, depresión, angustia, miedo, entre otros, los que también pueden provocar la aparición de crisis asmáticas. Para evitar ello considera importante un diálogo abierto entre padres e hijos, a fin de estabilizar el estado emocional de los pequeños y prevenir así una posible crisis asmática.
A pesar de padecer asma, es importante que luego de una crisis, el menor pueda participar de cualquier actividad física, a fin de estimular el desarrollo de sus capacidades o talentos.