Lima reportó 41 casos de personas picadas por alacranes durante el 2009
Nota de prensa
27 de enero de 2010 - 12:00 a. m.
Un total de 41 casos de accidentes por picaduras de alacranes se registró en Lima el año pasado, del que más del 53.7% ocurrió en los distritos de la zona este de la capital, siendo la población más afectada las personas adultas de ambos sexos, seguidos por los adolescentes y en una menor proporción, la población infantil y los ancianos.
Así lo sostuvo la coordinadora de la Estrategia Sanitaria Nacional de Zoonosis del Ministerio de Salud (Minsa), Ana María Navarro, tras señalar que Lima Este, con sus 8 distritos, El Agustino, Santa Anita, Ate, La Molina, Lurigancho-Chosica, Chaclacayo, Cieneguilla y San Juan de Lurigancho, reportó 22 de los accidentes por picaduras de alacranes, superando a las demás zonas de la capital.
Así, Lima Ciudad, con sus 22 distritos, reporta el 22% de los casos (9) y la Región Lima con sus 9 provincias no sobrepasa el 24% (10 casos).
Picaduras no son mortales
De otro lado, el infectólogo del Instituto Nacional de Salud (INS), Manuel Espinoza Silva, explicó que los alacranes que se hallan en zonas urbanas de la capital corresponden al género Hadruroides de la especie lunatus, los que pican inoculando un veneno que no es mortal, por lo que no es necesario el uso de antídotos. “Estos animales no causan la muerte de sus víctimas, y pensar que sí, es una completa equivocación”, reiteró.
En ese sentido, invocó a las personas de la capital, que pasan por estos accidentes, a guardar la calma, no alarmarse ni dejarse llevar por el mito de que las picaduras de alacranes son mortales.
“Muchas personas llegan al establecimiento de salud creyendo que van a morir, y sus familiares apoyan esa idea equivocada. Esta situación afecta psicológicamente al ánimo del paciente, quien se sugestiona sintiendo más dolor”, subrayó el representante del INS.
Indicó que para este tipo de picaduras se debe seguir un tratamiento ambulatorio simple, con analgésicos y antiinflamatorios con el fin de aliviar las principales molestias como hinchazón en la zona afectada, sensación de ardor y dolor leve. Los establecimientos del Minsa a nivel nacional proveen este servicio.
“Una vez ocurrido el hecho, la persona que ha sido picada por un alacrán deberá acudir a un establecimiento de salud público o privado, donde existe personal médico, asistencial y técnico, con experiencia en la atención de este tipo de casos”, finalizó.