El 30% de niños prematuros requiere transfusión de sangre para salvar su vida

Nota de prensa

21 de mayo de 2010 - 12:00 a. m.

En promedio, unos 760 recién nacidos y de condición crítica, con patologías graves y alto riesgo de morir, son atendidos anualmente en la Unidad de Cuidados Intensivos del Instituto Nacional Materno Perinatal del Ministerio de Salud (Minsa). De ellos, el 90% son niños prematuros y alrededor de 300 pesan menos de 1, 500 gramos, indicó Tania Paredes, jefa de la UCI del mencionado instituto.

Son estos últimos los que tiene más probabilidades de requerir transfusiones (sangre, plaquetas y sus derivados) mientras dure su tratamiento y evolución. A ellos se agregan 80 menores al año, quienes sufren de malformaciones congénitas y que requieren cirugía, señaló.

Julio Eduardo Portella Mendoza, director de Neonatología del citado instituto, precisó que las transfusiones que se necesitan dependen del grado de prematuridad y la condición del bebé. “Los niños más grandes y menos enfermos pueden necesitar tan sólo una, mientras que aquellos que padecen alteraciones respiratorias o cardíacas pueden requerir hasta 4 transfusiones”, enfatizó.

Explicó que cada unidad de sangre equivale a 450 ml. Al bebe sólo se le puede colocar 15 ml por kilo de peso. “Al sacar la cantidad necesaria de uno de estos componentes de la bolsa, el resto es desechada como medida de seguridad, según lo establece el Programa Nacional de Hemoterapia y Banco de Sangre del Minsa”, puntualizó.

Necesidad permanente
Tania Paredes destacó que en el área de Neonatología se utilizan aproximadamente 360 unidades de sangre al año. “Tenemos una necesidad permanente de unidades de sangre para salvar la vida de estos bebes”, indicó al agregar que además de ello, el área donde se encuentran ubicadas las gestantes, requiere de varias unidades para las madres que han sufrido de alguna complicación en el parto.

“No contamos con donantes voluntarios lo que hace que acudamos a la donación obligatoria; es decir, los parientes de aquellos bebes que serán operados o requieren de transfusiones, deben conseguir las unidades de sangre por su propia cuenta”, refirió.

Explicó que esto trae un mayor riesgo, pues los parientes pueden recurrir a vendedores de sangre. “La donación voluntaria disminuye el riesgo de infecciones porque quienes se animan a donar son gente con una mayor conciencia y que saben que están sanos”.

Por ello, la especialista hizo un llamado a la población a acercarse al banco de sangre de la ex Maternidad de Lima que atiende, de lunes a sábado, de 8 a.m. a 6 p.m. para donar sangre y salvar la vida de estos recién nacidos, así como a sus madres.