Un botiquín escolar es el primer auxilio

Nota de prensa
Todos los colegios deben contar con uno para cualquier emergencia

7 de marzo de 2013 - 12:00 a. m.

Tras el inicio del año escolar es necesario que todos los centros educativos -y de ser posible cada salón- cuenten con un botiquín de primeros auxilios con medicamentos y material necesario para atender a niños y adolescentes en caso sufran algún malestar físico, accidentes o golpes.

“El botiquín de primeros auxilios muy bien equipado es indispensable y no debe faltar en ningún colegio. Debería haber uno en todas las aulas, para atenciones primarias a los escolares que sufran accidentes, golpes, caídas, o molestias imprevistas como mareos, nauseas, dolores de cabeza o estómago, mientras se les traslada a un centro de salud, si lo necesitaran”, afirmó el especialista de la Farmacia Institucional de la Digemid, Aldo Álvarez Risco.

Detalló que un botiquín escolar debe contener medicamentos, material sanitario, instrucciones de primeros auxilios y teléfonos de emergencia, para brindar atención oportuna y apropiada a los niños y adolescentes.

Los medicamentos que no deben faltar son: analgésicos-antipiréticos para calmar el dolor o bajar la fiebre, como el Paracetamol y antiinflamatorios como el Ibuprofeno; material sanitario imprescindible: termómetro, tijeras de punta redonda, pinzas de depilar, guantes de látex, jabón líquido, alcohol, algodón, agua oxigenada (ayuda a detener hemorragias); y antisépticos como Povidona yodada o Clorhexidina para evitar infecciones”, enumeró Álvarez Risco.

Agregó a la lista el suero fisiológico para limpiar heridas, gasa estéril para comprimir heridas o cubrirlas, vendas de gasa elásticas de diversos tamaños, esparadrapo, imperdibles, pañuelos triangulares para inmovilizar brazos (cabestrillo) o piernas, y mascarillas de protección facial.

“Es importante guardar en el botiquín un manual de primeros auxilios y láminas explicativas con maniobras de reanimación cardiopulmonar, y posiciones de seguridad para niños accidentados. Una lista de teléfonos de emergencia que incluya los números de los establecimientos de salud más cercanos y de los bomberos”, añadió.

El especialista de la Digemid sugirió que el botiquín escolar debe ser -de preferencia- una caja con asa transportable que cierre herméticamente pero fácil de abrir, estar ubicado en un lugar visible, seguro, fresco y seco, que no tenga contacto con la luz del sol y lejos del alcance de los niños.

“Es conveniente que los profesores y auxiliares a cargo de los menores estén capacitados para un adecuado manejo del botiquín y para tomar la decisión correcta ante una emergencia. Hay que verificar con regularidad que los medicamentos tengan fecha de vencimiento vigente, caso contrario, remplazarlos”, concluyó.