Jugo de zanahoria, gaseosas y otros bronceadores caseros no protegen contra quemaduras y radiación ultravioleta

Nota de prensa
PRODUCTOS CASEROSPREPARADOS COMO BRONCEADORES NO PROTEGEN LA PIEL

9 de marzo de 2013 - 12:00 a. m.

El uso de gaseosas, jugos o aceites naturales y otros productos o preparados conocidos como bronceadores caseros, no protege la piel de quemaduras generadas por la exposición directa al sol, ni de los efectos de las radiaciones ultravioleta, cuyos niveles se han incrementado considerablemente en los últimos días, informó la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid) del Ministerio de Salud (Minsa).

“Aplicar sobre la piel preparados caseros como el jugo de zanahoria o de limón, aceite de oliva, germen de trigo o hasta gaseosas de color oscuro en lugar de un bronceador adecuado es muy peligroso, más aún en estos días en que los niveles de radiación ultravioleta se han incrementado considerablemente en todo el país”, explicaron especialistas de la Digemid.

En ese sentido, los voceros de la Digemid explicaron que el uso de bronceadores caseros no constituye un ahorro como habitualmente se cree, pues no garantizan un buen bronceado, no contienen los elementos necesarios para proteger la piel de los efectos de la exposición directa al sol ni a los rayos ultravioleta, lo que a futuro podría provocar daños mayores.

“Las personas que se aplican un bronceador casero o artesanal no solo pueden sufrir quemaduras sino que, a largo plazo, la radiación acumulada en su piel puede ocasionar melanomas o algún tipo de cáncer. Pese a ello, las personas se pasan las recetas para elaborarlos de mano en mano y hasta son publicadas en páginas de internet, sin tomar en cuenta los peligros que su uso implica para la salud”, advirtieron.

Recomendaciones

Con el fin de evitar estos efectos nocivos, los especialistas de la Digemid recomendaron a la población utilizar bronceadores que contengan óxido de zinc -que es un filtro solar físico- u otros factores que prevengan las quemaduras y los cambios degenerativos de la piel que causan los rayos ultravioleta.

“A ello debemos agregar que se deben seguir las recomendaciones del fabricante consignadas en el empaque del bronceador, volver a aplicarlo luego de un baño prolongado en el mar o piscina o después de tres horas, usar ropa apropiada, anteojos con filtros adecuados y sombreros que protejan el rostro y consumir entre dos y tres litros de agua al día además de frutas y verduras, de lo contrario, nuestra piel estará expuesta a peligros que, con las precauciones del caso podemos evitar fácilmente”, concluyeron.