Milagro de vida: niña con quemaduras graves se recupera gracias al INSN San Borja

Ynés es una niña símbolo porque luchó contra la adversidad. Llegó en febrero con un severo diagnóstico: quemaduras graves en el 65% de su pequeño cuerpo de niña adolescente, producto de la explosión de un balón de gas que hizo pensar lo peor a los galenos que la atendieron.

Hoy en día, tras permanecer cinco meses en la Unidad de Cuidados Intensivos del Instituto Nacional del Niño de San Borja (INSN-SB) la vida le vuelve a sonreír porque no solamente acaba de cumplir 15 años en este nosocomio de alta complejidad, sino que está en franca rehabilitación y próxima a regresar a su natal Ambo, en Huánuco.

"Estuvo a punto de morir con septicemia, una infección mortal que empeora en los pacientes quemados", explica el Dr. Víctor Rodríguez, médico que recuerda con nostalgia esos cuatro meses de operaciones críticas y de remoción de tejidos que soportó Ynés Lucas.

Rodríguez, quien también es el jefe del eje de Atención Integral del Paciente Quemado del INSN SB, refiere que en su tratamiento se ha realizado un autoinjerto, es decir, sacar piel de otras partes para cubrir la parte dañada.

"Felizmente Ynés es fuerte, reaccionó bien y ahora está a punto de dejar el hospital", cuenta emocionado el especialista, ante la algarabía de sus familiares. Ynés nuevamente vuelve a sonreír.

Más de cuatro mil atenciones

Desde el 2013, el INSN-SB ha brindado 4,748 consultas externas a niños quemados.

El INSN-SB es un hospital de alta complejidad, que atiende pacientes referidos de otros hospitales y regiones del país. Brinda atención del paciente quemado, cardiología y cirugía cardiovascular, transplante de médula ósea, neonatología y neurología.