Las experiencias estresantes afectan la salud mental

Nota de prensa
Experto recomienda vigilar los estados de ánimo, practicar pensamientos positivos, llevar una vida saludable sin excesos para evitar el estrés.

4 de setiembre de 2014 - 12:00 a. m.

El estrés puede tener un impacto importante en la aparición de trastornos mentales como la depresión o los trastornos de ansiedad por lo que su prevención resulta de la mayor importancia. Según los estudios epidemiológicos del Instituto Nacional de Salud Mental 2012, un importante porcentaje de limeños, en especial las mujeres, experimenta un importante nivel de estrés.

El Dr. Javier Saavedra Castillo, director de Investigación del Instituto Nacional de Salud Mental, sostuvo que el estresor más significativo se relaciona con la delincuencia, tema que cerca del 60% de limeños considera de bastante o mucha tensión. Le siguen las preocupaciones en torno a la salud y el dinero.

Explicó que las condiciones actuales del quehacer diario han modificado considerablemente los hábitos de alimentación y sueño de tal manera que la persona duerme menos tiempo del que necesita y se alimenta en forma inapropiada, lo que a su vez condiciona una menor vitalidad y concentración. Ello, sumado a la presiones del trabajo, generan un círculo vicioso de tensión, que de hacerse crónico afectaría su salud mental aumentando el riesgo de trastornos de ansiedad y depresión así como de enfermedades físicas.

“Existe una sensación generalizada de que el tiempo pasa más rápido y de que no podemos lograr a tiempo todos los objetivos. Indudablemente las exigencias del mercado y el avance en las comunicaciones han jugado un papel importante para que cada vez tengamos que lograr ciertas metas en más corto tiempo”, subrayó.

El Dr. Saavedra advirtió que cuando las situaciones estresantes no se resuelven o canalizan en forma apropiada se produce una sobrecarga en nuestros sistemas naturales de alarma, lo que repercute en el organismo. Entonces el cuerpo se mantiene en constante alerta, aumentado el consumo de energía e incrementando su desgaste. “Si el estrés se prolonga y se hace crónico la capacidad del cuerpo para recuperarse y defenderse puede verse seriamente comprometida, y puede predisponer con el tiempo a problemas como la depresión”, acotó.

Cambios físicos y anímicos

El especialista señaló que una persona estresada puede presentar diversas molestias físicas como cansancio, dolores de cabeza, palpitaciones, gastritis, problemas para la concentración y alteraciones anímicas, por ejemplo, desánimo, irritabilidad, nerviosismo y ansiedad.

A fin de evitar el estrés el especialista recomendó practicar una vida saludable sin excesos y establecer un balance estricto entre las obligaciones y el esparcimiento. “El trabajo solo es una parte de nuestras vidas. Debemos colocar en nuestra agenda otros aspectos vitales como la familia y los amigos”, recomendó.

En lo laboral, sugirió no asumir más responsabilidades de las que se puedan racionalmente asumir. Ante situaciones que causan preocupación, desánimo o ira las personas deben vigilar sus estados de ánimo, practicar pensamientos positivos; y ante un conflicto o problema deben calmarse antes de reaccionar.

“Es importante que las personas dediquen un tiempo para su imagen personal, apague su teléfono en sus días libres, planifique sus horarios, no lleve el trabajo a casa y practique algún deporte, actividad física o pasatiempo”, subrayó.