Se debe afrontar una crisis de familia y hablar de ella para evitar que afecte la salud mental de los hijos

Nota Informativa
Cuando las dificultades se superan con éxito la familia se fortalece y se hace más solida

15 de diciembre de 2014 - 12:00 a. m.

Todas las familias pasan por etapas en su vida de desarrollo buscando un crecimiento y estabilidad. Se debe saber afrontar el cambio de una etapa a otra para evitar crisis, desorganización, dudas y en casos extremos la separación o ruptura de la pareja, así señaló el psicólogo Emir Valencia, del Instituto Nacional de Salud Mental “Honorio Delgado-Hideyo Noguchi”.

Subrayó que el silencio no es la mejor salida, más bien agrava la situación. Explicó que por lo general las familias pasan por cinco etapas: formación de la pareja, familia con hijos, familias con hijos adolescentes, familias con hijos adultos y familia en edad avanzada.

“Para pasar de un ciclo al otro, cada familia siente la necesidad de revisar su modo de funcionamiento, si no hay ese proceso de reorganización puede verse expuesta al sufrimiento y disfuncionalidad”, resaltó.

El silencio no es la mejor forma de enfrentar la crisis
La clave para hacer frente a una crisis familiar está en cómo encararla y adaptarse a la nueva realidad que tienen por delante, sostuvo el especialista.

En esa línea advirtió que ante una crisis en la familia el silencio no es la mejor forma de solución; causa daño y afecta la salud mental de sus miembros. Si hay niños, ellos perciben las situaciones, y si no se les explica lo que está sucediendo se les genera sentimientos de incertidumbre, temor y ansiedad que pueden empeorar la situación.

“Cuando se habla a los niños, es importante hacerlo en primera persona y de acuerdo a su edad, de esa manera lograrán entender con mayor facilidad lo que se les quiere decir”, recomendó.

El psicólogo puntualizó que cuando las dificultades son superadas con éxito, la familia crece y se hace más fuerte y sólida. Sostuvo que para enfrentar una crisis familiar, no hay que tener temor a pedir ayuda, ya sea de un pariente o ayuda profesional.