Útiles escolares pueden resultar tóxicos para menores

Nota Informativa
Si son de dudosa procedencia y calidad

12 de febrero de 2015 - 12:00 a. m.

Se acerca el inicio de clases en los colegios y muchos padres y madres de familia empezarán con la compra de útiles escolares. Ante ello el Ministerio de Salud (Minsa) recomienda la adquisición de productos de marcas debidamente registradas y en lugares autorizados puesto que aquellos útiles de dudosa procedencia pueden contener elementos dañinos para la salud de los menores.

Productos en los cuales se tiene contacto directo con la piel como las plastilinas y témperas, podrían resultar peligrosos para los niños, según cómo los utilicen y el tiempo que se expongan a estos, generando reacciones inmediatas principalmente en quienes tienen piel sensible o padecen de algún tipo de alergia.

También es común que los alumnos muerdan los lápices u otros artículos que, por el olor y color, le son atractivos y al hacerlo ingieren plomo en muy pequeñas cantidades que al acumularse progresivamente en el organismo pueden producir a largo plazo un grave deterioro en su nivel intelectual dado que dicho metal no se elimina del cuerpo de forma natural.

Estos productos también podrían contener cadmio, mercurio, cromo entre otros metales pesados que pueden producir nauseas, vómitos, lesionar los pulmones, los riñones, el sistema nervioso central y el sistema reproductivo señalaron voceros de la Estrategia Sanitaria Nacional de Atención a Personas Afectadas por Contaminación con Metales Pesados y otras Sustancias Químicas del Minsa.

Mientras más intenso sea el color y olor de estos productos es probable que la calidad del material de su fabricación sea menor y genere un mayor riesgo para la salud de las niñas y niños.

Lápices marcadores (resaltadores) o plumones, lapiceros, lápices con mina de grafito (de carbón) y de colores, temperas y acuarelas, plastilinas, borradores de aroma y color y cintas adhesivas y pegamentos son algunos de los productos de uso escolar que contienen metales pesados o sustancias tóxicas.

Por ello es importante que antes de adquirirlos, los padres y madres de familia verifiquen la información del producto como la razón social y dirección del fabricante o importador, el número de RUC y principalmente los números de registro nacional y autorización sanitaria otorgados por la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa)