Minsa: 2169 personas iniciaron tratamiento por cáncer de estómago en lo que va del año

Nota de prensa
El principal factor de riesgo de esta neoplasia es la infección crónica por la bacteria Helicobacter pylori, advierte especialista del IREN Centro
Minsa: 2169 personas iniciaron tratamiento por cáncer de estómago en lo que va del año

Fotos: Minsa

8 de noviembre de 2025 - 5:41 p. m.

¿Sabía usted que la infección por Helicobacter pylori (H pylori) es el principal factor de riesgo para algunos casos de cáncer de estómago? A esta causa se suman otros factores como el alto consumo de alimentos procesados, salados o ahumados, así como el consumo de tabaco y alcohol en exceso.

Según la Dirección de Prevención y Control de Cáncer del Ministerio de Salud (Minsa), 2169 personas iniciaron tratamiento por cáncer de estómago en lo que va del presente año. De acuerdo a Globocan, en el Perú, este tipo de cáncer es el segundo con más incidencia en los varones y el quinto en las mujeres.

La especialista en gastroenterología oncológica del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (IREN) Centro, Karina Orihuela Lazo, explicó que la etiología del cáncer gástrico es multifactorial: sin embargo, la infección crónica por la bacteria del Helicobacter pylori constituye el principal factor de riego. “Los pacientes que aquejan este mal deben completar su tratamiento”, señaló.

SÍNTOMAS
El cáncer de estómago en sus etapas iniciales suele ser silenciosa, pero existen signos y síntomas que deben generar sospecha, especialmente si persisten o se agravan. Entre ellos pérdida de peso involuntaria, dolor o molestia continua en la parte superior del abdomen, náuseas o vómitos frecuentes, a veces con sangre; dificultad para tragar (disfagia), sensación de llenura temprana al comer (saciedad precoz), fatiga o debilidad general, heces con sangre.

Por lo general las personas mayores de 45 años son los que presentan este tipo de cáncer, aunque en los últimos años se han registrado casos en personas más jóvenes, generalmente asociados a factores genéticos o síndromes hereditarios como el síndrome de cáncer gástrico difuso hereditario (CDH1).

DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
Para detectar esta neoplasia se requiere una evaluación clínica detallada y pruebas específicas, siendo la endoscopia digestiva alta con biopsia. “Este procedimiento permite observar directamente el revestimiento del estómago y tomar muestras (biopsias) de lesiones sospechosas. También se hace otros estudios para confirmar el tipo de cáncer como una tomografía computarizada (TAC) o ultrasonido endoscópico (EUS)”, explicó la gastroenteróloga.

El tratamiento dependerá del tipo, ubicación, estadio del cáncer y del estado general del paciente que va desde procedimientos endoscópicos avanzados, cirugía o en combinación con quimioterapia o radioterapia.

“En el caso de cáncer gástrico temprano se realiza resección endoscópica curativa, técnica mínimamente invasiva. Si el cáncer está muy localizado, bien diferenciado, y no hay invasión vascular o ganglionar aparente, se puede optar por un tratamiento endoscópico, que evita cirugía mayor”, manifestó.

PREVENCIÓN
La especialista recomendó evitar el consumo de alimentos muy salados con residuos de plaguicidas, fermentados o ahumados, así como carne procesada (embutidos, jamón, salchichas), tabaco y alcohol excesivo, comidas quemadas o con exceso de grasa, la automedicación crónica con antiinflamatorios, controlar el reflujo gástrico crónico o la gastritis persistente, y la obesidad.

Además, se aconseja una alimentación saludable y hábitos como dieta rica en frutas frescas (cítricos, bayas, manzanas) y verduras (brócoli, coliflor, espinaca, zanahorias), fibra dietética como granos integrales, legumbres, además realizar actividad física.

La indicación de tamizaje endoscópico (cribado) en personas con antecedentes familiares de cáncer gástrico es fundamental o con síntomas persistentes es clave para la detección precoz y tratamiento de esta enfermedad.