Minsa: Hospital Loayza salva la vida de anciana al extraerle un anillo alojado en la garganta
Nota de prensaEl objeto fue retirado sin causar lesiones a la paciente
Fotos: Hospital Arzobispo Loayza
26 de junio de 2025 - 4:06 p. m.
Una paciente de 89 años fue atendida de emergencia en el Hospital Nacional Arzobispo Loayza del Ministerio de Salud (Minsa) luego de haber ingerido accidentalmente un anillo, el cual quedó alojado en su garganta, impidiéndole deglutir y poniendo en riesgo su vida. Gracias a la rápida intervención del equipo médico especializado, el objeto fue extraído con éxito sin necesidad de cirugía.
Según detalló el Dr. Miguel Chávez Rossell, médico gastroenterólogo del hospital, la paciente fue llevada por su hija, quien refirió que, debido a un cuadro de deterioro mental, la mujer había ingerido uno de sus anillos. Una radiografía de cuello evidenció que el cuerpo extraño se encontraba en la unión faringoesofágica. Afortunadamente, al tratarse de un anillo sin bordes afilados, el riesgo de lesión interna era bajo, lo que facilitó el procedimiento endoscópico.
Una vez extraído el cuerpo extraño, la paciente fue evaluada por los servicios de Otorrinolaringología y Gastroenterología, confirmando su recuperación satisfactoria. Fue dada de alta pocas horas después del procedimiento.
Este caso, si bien llamativo por la edad de la paciente y el objeto ingerido, no fue un hecho aislado. El Servicio de Gastroenterología del Hospital Loayza atiende emergencias de este tipo de forma continua, gracias a que cuenta con gastroenterólogos disponibles las 24 horas del día, siendo uno de los pocos centros públicos con esta capacidad especializada.
El Dr. Chávez Rossell destacó que el hospital ha resuelto con éxito casos mucho más complejos, como la extracción de prótesis dentales parciales, alfileres, tachuelas, espinas de pescado, huesos de carne y objetos metálicos filosos, varios de los cuales causaron perforaciones parciales del esófago. Estos procedimientos, que en otras circunstancias habrían requerido cirugía, fueron resueltos de manera endoscópica, lo que redujo significativamente los riesgos para los pacientes.
Además, subrayó que la clave está en la intervención oportuna y el trabajo en equipo. En muchos de estos casos se requiere la participación del servicio de Anestesiología, especialmente cuando se trata de pacientes con alteraciones mentales que no colaboran con el procedimiento y necesitan sedación profunda para garantizar una extracción segura.
Finalmente, el especialista advirtió que los grupos de mayor riesgo para la ingesta accidental de objetos son los adultos mayores con deterioro cognitivo, pacientes psiquiátricos, personas en estado de ebriedad y niños. Por ello, recomendó a los familiares evitar que estos grupos vulnerables tengan a su alcance objetos pequeños que puedan llevarse inadvertidamente a la boca.
El Hospital Nacional Arzobispo Loayza reafirma su compromiso con una atención médica oportuna, especializada y segura, respaldada por un equipo multidisciplinario altamente capacitado y tecnología de punta al servicio de la salud pública.
Según detalló el Dr. Miguel Chávez Rossell, médico gastroenterólogo del hospital, la paciente fue llevada por su hija, quien refirió que, debido a un cuadro de deterioro mental, la mujer había ingerido uno de sus anillos. Una radiografía de cuello evidenció que el cuerpo extraño se encontraba en la unión faringoesofágica. Afortunadamente, al tratarse de un anillo sin bordes afilados, el riesgo de lesión interna era bajo, lo que facilitó el procedimiento endoscópico.
Una vez extraído el cuerpo extraño, la paciente fue evaluada por los servicios de Otorrinolaringología y Gastroenterología, confirmando su recuperación satisfactoria. Fue dada de alta pocas horas después del procedimiento.
Este caso, si bien llamativo por la edad de la paciente y el objeto ingerido, no fue un hecho aislado. El Servicio de Gastroenterología del Hospital Loayza atiende emergencias de este tipo de forma continua, gracias a que cuenta con gastroenterólogos disponibles las 24 horas del día, siendo uno de los pocos centros públicos con esta capacidad especializada.
El Dr. Chávez Rossell destacó que el hospital ha resuelto con éxito casos mucho más complejos, como la extracción de prótesis dentales parciales, alfileres, tachuelas, espinas de pescado, huesos de carne y objetos metálicos filosos, varios de los cuales causaron perforaciones parciales del esófago. Estos procedimientos, que en otras circunstancias habrían requerido cirugía, fueron resueltos de manera endoscópica, lo que redujo significativamente los riesgos para los pacientes.
Además, subrayó que la clave está en la intervención oportuna y el trabajo en equipo. En muchos de estos casos se requiere la participación del servicio de Anestesiología, especialmente cuando se trata de pacientes con alteraciones mentales que no colaboran con el procedimiento y necesitan sedación profunda para garantizar una extracción segura.
Finalmente, el especialista advirtió que los grupos de mayor riesgo para la ingesta accidental de objetos son los adultos mayores con deterioro cognitivo, pacientes psiquiátricos, personas en estado de ebriedad y niños. Por ello, recomendó a los familiares evitar que estos grupos vulnerables tengan a su alcance objetos pequeños que puedan llevarse inadvertidamente a la boca.
El Hospital Nacional Arzobispo Loayza reafirma su compromiso con una atención médica oportuna, especializada y segura, respaldada por un equipo multidisciplinario altamente capacitado y tecnología de punta al servicio de la salud pública.