Adultos y adultos mayores deben protegerse mejor ante los cambios de clima
Nota de prensaActividad física, buena alimentación y abrigo ayudan a enfrentar el invierno



Fotos: Minsa
3 de junio de 2025 - 1:01 p. m.
Con el avance del invierno, el frío se siente con más fuerza y puede afectar seriamente la salud, especialmente de los adultos (de 30 a 59 años) y adultos mayores (de 60 años a más), quienes son más vulnerables ante los cambios bruscos de temperatura.
El Ministerio de Salud (Minsa) recuerda que, con el paso de los años, el cuerpo pierde capacidad para regular su temperatura interna. La circulación sanguínea se vuelve más lenta, se reduce la grasa que nos protege del frío y hay una mayor presencia de enfermedades como la diabetes, hipertensión, entre otras, que pueden agravar los efectos del clima. Todo esto hace que los riesgos aumenten si no se toman medidas de protección.
Las personas adultas, al estar en edad económicamente activa, muchas veces se exponen al frío en sus trayectos o lugares de trabajo. Por eso, es importante abrigarse adecuadamente, consumir alimentos calientes y nutritivos, dormir bien y evitar el estrés, ya que este también debilita el sistema inmune. Además, se debe estar alerta a síntomas como escalofríos, temblores, fatiga o somnolencia excesiva, que pueden indicar que la temperatura corporal está bajando peligrosamente.
En el caso de las personas adultas mayores, el riesgo es mayor, ya que su organismo presenta una menor capacidad para adaptarse al frío. Además de abrigarse, es recomendable mantener una temperatura cálida dentro del hogar, usar mantas, medias gruesas, gorros y evitar la exposición al aire frío, especialmente durante las mañanas y noches.
El Minsa recomienda mantener una dieta variada, rica en alimentos calientes, frutas y verduras de estación. Los caldos, sopas, menestras y bebidas calientes son aliados importantes para conservar el calor corporal y fortalecer las defensas. También, es fundamental mantenerse hidratado, aunque no se tenga mucha sed.
Otro aspecto clave es la vacunación. Las personas adultas con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, obesidad o problemas respiratorios, así como las personas adultas mayores, deben recibir la vacuna contra la influenza estacional y el neumococo, disponibles de forma gratuita en los establecimientos de salud del país.
El Ministerio de Salud hace un llamado a las personas adultas y adultas mayores para que no bajen la guardia durante el invierno. Caminar, moverse dentro de casa, realizar ejercicios sencillos, compartir tiempo en familia y acudir a los controles de salud son acciones que fortalecen el cuerpo y el bienestar emocional. Con medidas simples pero constantes, podemos cuidarnos mejor y evitar complicaciones.
Este invierno, el cuidado empieza por uno mismo y se extiende a quienes nos rodean. Abrigarse, alimentarse bien, vacunarse y mantenerse activo son claves para seguir adelante con salud y calidad de vida.
El Ministerio de Salud (Minsa) recuerda que, con el paso de los años, el cuerpo pierde capacidad para regular su temperatura interna. La circulación sanguínea se vuelve más lenta, se reduce la grasa que nos protege del frío y hay una mayor presencia de enfermedades como la diabetes, hipertensión, entre otras, que pueden agravar los efectos del clima. Todo esto hace que los riesgos aumenten si no se toman medidas de protección.
Las personas adultas, al estar en edad económicamente activa, muchas veces se exponen al frío en sus trayectos o lugares de trabajo. Por eso, es importante abrigarse adecuadamente, consumir alimentos calientes y nutritivos, dormir bien y evitar el estrés, ya que este también debilita el sistema inmune. Además, se debe estar alerta a síntomas como escalofríos, temblores, fatiga o somnolencia excesiva, que pueden indicar que la temperatura corporal está bajando peligrosamente.
En el caso de las personas adultas mayores, el riesgo es mayor, ya que su organismo presenta una menor capacidad para adaptarse al frío. Además de abrigarse, es recomendable mantener una temperatura cálida dentro del hogar, usar mantas, medias gruesas, gorros y evitar la exposición al aire frío, especialmente durante las mañanas y noches.
El Minsa recomienda mantener una dieta variada, rica en alimentos calientes, frutas y verduras de estación. Los caldos, sopas, menestras y bebidas calientes son aliados importantes para conservar el calor corporal y fortalecer las defensas. También, es fundamental mantenerse hidratado, aunque no se tenga mucha sed.
Otro aspecto clave es la vacunación. Las personas adultas con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, obesidad o problemas respiratorios, así como las personas adultas mayores, deben recibir la vacuna contra la influenza estacional y el neumococo, disponibles de forma gratuita en los establecimientos de salud del país.
El Ministerio de Salud hace un llamado a las personas adultas y adultas mayores para que no bajen la guardia durante el invierno. Caminar, moverse dentro de casa, realizar ejercicios sencillos, compartir tiempo en familia y acudir a los controles de salud son acciones que fortalecen el cuerpo y el bienestar emocional. Con medidas simples pero constantes, podemos cuidarnos mejor y evitar complicaciones.
Este invierno, el cuidado empieza por uno mismo y se extiende a quienes nos rodean. Abrigarse, alimentarse bien, vacunarse y mantenerse activo son claves para seguir adelante con salud y calidad de vida.