Mujeres rurales en Perú enfrentan crisis silenciosa de salud mental: estigma, violencia y falta de acceso a servicios especializados

Nota de prensa
El Minsa impulsa telemedicina y líneas de ayuda, pero persisten brechas de género y geográficas.
Mujeres rurales en Perú enfrentan crisis silenciosa de salud mental: estigma, violencia y falta de acceso a servicios especializados

15 de octubre de 2025 - 11:36 a. m.

El 15 de octubre es el Día Internacional de la Mujer Rural, un día para visibilizar su trabajo en la agricultura, la seguridad alimentaria y el desarrollo rural. Si bien no es un día específico para la salud mental, los desafíos en este ámbito, como el acceso limitado a servicios de salud de calidad y la carga de trabajo, se consideran un problema crucial que las mujeres rurales enfrentan.

Las mujeres rurales en Perú enfrentan una crisis de salud mental agravada por el estigma, el aislamiento geográfico y la violencia de género. En el marco del Día Internacional de las Mujeres Rurales, que se conmemora cada 15 de octubre, se advierte sobre la urgencia de atender esta problemática invisible.

Cifras nacionales reflejan que el 30.89% de peruanos ha padecido un trastorno psiquiátrico a lo largo de su vida, con predominio de depresión (11.9%) y ansiedad (10.1%). Especialistas señalan que esta población sufre con mayor intensidad debido a roles de género rígidos, falta de acceso a educación y servicios, y exposición a violencia familiar. “El estigma social y el miedo al juicio impiden que las mujeres busquen ayuda profesional”, explican los especialistas. Agregan que, a diferencia de los hombres, quienes suelen mostrar escepticismo hacia tratamientos como la telemedicina, las mujeres rurales cargan con el peso cultural de no "fallar" en sus roles de cuidadoras.

La violencia de género emerge como un factor determinante. Según el Minsa, las mujeres en zonas rurales experimentan altos índices de maltrato físico, psicológico y sexual, lo que incrementa el riesgo de trastornos como estrés postraumático (TEPT), cuya prevalencia de vida en Perú alcanza el 8.5%. El aislamiento geográfico profundiza la vulnerabilidad. La dispersión de comunidades, la falta de transporte y la escasa infraestructura digital limitan el acceso a servicios de salud mental especializados. “Muchas viven en zonas donde ni siquiera hay un centro de salud de primer nivel”, advierten.

Los Centros de Salud Mental Comunitaria (CSMC) son otra pieza clave. Hasta el momento existen 293 CSMC en el país, con proyección a superar los 300. No obstante, se requiere duplicar esta cifra para llegar a las zonas más alejadas. Desde el Minsa se desarrollan acciones en las regiones a través de telesalud, acompañando profesionales para la mejora del cuidado integral en salud mental a mujeres en contexto rurales. La telemedicina y tele psiquiatría se perfilan como alternativas prometedoras, especialmente tras el incremento de atenciones por tele interconsultas en regiones como Lambayeque, Cajamarca y Ancash. Sin embargo, su efectividad depende de una adaptación cultural y de género que aún está en desarrollo. “Es crucial capacitar al personal de salud en el primer nivel de atención”, subrayan los profesionales de la salud. Agregan que muchos casos de depresión y ansiedad pueden ser manejados localmente si se fortalece la detección temprana y se reduce el estigma mediante educación comunitaria. En un estudio sobre telemedicina para salud mental en comunidades rurales del Perú, se identificó que, aunque las mujeres rurales mostraban disposición a emplear atención remota, el estigma percibido y la desconfianza limitaban su uso efectivo. Así, entre otros, es necesario incrementar la inversión en infraestructura digital, con una política de estado que priorice la salud mental rural.

La promoción de la salud mental con enfoque intercultural es otra prioridad. El Minsa trabaja en adaptar herramientas y mensajes a las cosmovisiones locales, incorporando a líderes comunales y parteras en la sensibilización.

Frente a todo este escenario, el Minsa ha implementado estrategias como una línea gratuita que ofrece orientación y soporte emocional las 24 horas marcando el 113, opción 5, para casos de ansiedad, depresión y otras crisis. Recordando, además, que siempre se puede acudir al centro de salud más cercano al domicilio o al Centro de Salud Mental Comunitario de la jurisdicción.

En el Día Internacional de las Mujeres Rurales, el llamado es claro: integrar salud mental, género y ruralidad en las políticas públicas. Atender su salud mental no es un lujo, es una deuda histórica con quienes alimentan al Perú”.