La inteligencia artificial no reemplaza la terapia: la salud mental necesita escucha y acompañamiento humano

Nota de prensa
Especialistas advierten sobre el riesgo de creer que una aplicación de IA puede sustituir una consulta psicológica. La atención profesional y personalizada sigue siendo la clave para cuidar la salud.
La inteligencia artificial no reemplaza la terapia: la salud mental necesita escucha y acompañamiento humano

4 de setiembre de 2025 - 5:20 p. m.

El cuidado de la salud mental es un proceso que exige sensibilidad, criterio clínico y un acompañamiento humano constante. Ninguna tecnología, por avanzada que parezca, puede reemplazar la experiencia, la empatía y la preparación de un profesional de la psicología, es decir una atención persona-persona.

Hablar con una inteligencia artificial puede parecer una alternativa rápida y sencilla, pero en realidad es un espejismo. Estas plataformas no logran reconocer emociones profundas, historias de vida únicas ni las características particulares de cada persona.

Aunque las respuestas de la inteligencia artificial parecen empáticas, no existe una conexión emocional real detrás de ellas. Se trata de un lenguaje programado, sin sensibilidad humana, que puede inducir a errores o falsas expectativas. En esencia, la IA no “piensa” ni “siente”, sino que ejecuta cálculos lógicos en tiempo real, ofreciendo soluciones rápidas o recomendaciones a partir de los datos que tiene disponibles. Su acción es limitada: no evalúa el contexto humano de manera integral, carece de empatía y no establece un vínculo terapéutico, elementos esenciales en la atención psicológica o psiquiátrica. Por ello, la IA debe entenderse como un complemento tecnológico, pero nunca como un reemplazo del acompañamiento profesional que garantiza una atención personalizada, segura y ética.

Entre los jóvenes, este fenómeno es aún más delicado. Muchos sienten temor de acudir al psicólogo por miedo a ser juzgados, discriminados o estigmatizados. La disponibilidad de tener a la IA 24 horas al día a disposición, se hace atractiva y luce como alternativa de mayor facilidad y acceso. Otros, por falta de información, limitación económica o tiempo, buscan alternativas más fáciles y rápidas en la tecnología.

Una verdadera consulta psicológica se construye sobre la escucha activa, la comprensión del contexto vital y la confianza mutua entre paciente y terapeuta. Este vínculo permite diseñar estrategias de tratamiento adaptadas a cada situación, algo que ningún algoritmo puede garantizar. La salud mental no se resuelve con frases automáticas o generalizadas. Es un proceso que requiere tiempo, confianza y la mirada cuidadosa de un especialista capaz de identificar y comprender las causas, síntomas y necesidades de intervención personalizada.

Existen riesgos al utilizar como primera opción una IA como consejero o terapeuta. Por un lado, se posterga la ayuda profesional suele abrir la puerta a conductas de riesgo y al no recibir atención temprana se cronifica o agrava. Enfrentar solo el malestar emocional puede incrementar el riesgo de consumo de alcohol o drogas, aislamiento social, automedicación, inclusive el suicidio. En cambio, una consulta psicológica, profesional, ofrece un espacio seguro y confidencial, donde la persona puede expresarse sin miedo, sentirse comprendida y recibir una orientación técnica y ética que favorece su recuperación.

El proceso terapéutico no se limita a una charla ocasional, se requiere un plan de atención individualizado, con número de sesiones ajustadas a cada caso y de modo especial: el contacto personal. El psicólogo evalúa avances, detecta retrocesos y ajusta estrategias para asegurar un progreso real y sostenido.

Confiar en un profesional de la salud significa acudir a alguien con formación académica, práctica clínica y sensibilidad humana. Ese acompañamiento cercano es esencial para superar problemas emocionales, prevenir complicaciones mayores y mejorar su calidad de vida.

Por ello, la recomendación es clara: ante cualquier malestar emocional, lo mejor es acudir al centro de salud más cercano, visitar un Centro de Salud Mental Comunitario o llamar de manera gratuita a la Línea 113, opción 5, disponible las 24 horas del día.

La salud mental merece cuidado, respeto y atención responsable. Pensar que una inteligencia artificial puede reemplazar la terapia es minimizar la complejidad de la vida humana. Buscar apoyo en un profesional sigue siendo, y será siempre, la mejor decisión.