Nutrición y salud mental: cómo lo que comemos influye en nuestras emociones

Nota de prensa
En el Día Mundial de la Nutrición, especialistas del Instituto Nacional de Salud Mental recuerdan que una buena alimentación no solo previene enfermedades físicas, sino también fortalece el equilibrio
Nutrición y salud mental: cómo lo que comemos influye en nuestras emociones

28 de mayo de 2025 - 12:39 p. m.

Alimentarse bien no solo mantiene el cuerpo sano, también protege la mente. Con motivo del Día Mundial de la Nutrición, el Instituto Nacional de Salud Mental “Honorio Delgado - Hideyo Noguchi” (INSM “HD-HN”) advierte sobre la estrecha relación entre los hábitos alimentarios y el bienestar emocional.

“La nutrición impacta directamente en la salud mental. No se trata solo de lo que comemos, sino de cómo los nutrientes que ingerimos influyen en la producción de neurotransmisores clave para el funcionamiento del cerebro”, explicó la Lic. Maribel Reyna Casas, jefa del Servicio de Nutrición del INSM “HD-HN”.

De acuerdo con la especialista, dietas pobres en nutrientes pueden afectar la comunicación entre neuronas (sinapsis) y generar trastornos como ansiedad, depresión, irritabilidad y fatiga crónica. En cambio, una dieta rica en alimentos saludables mejora el estado de ánimo, la memoria, la concentración y la calidad del sueño.

Alimentos que alteran el ánimo
El exceso de azúcares refinados, grasas saturadas, cafeína, alcohol y aditivos artificiales actúan como un “estresor alimentario”, afectando negativamente el sistema nervioso. “Su consumo frecuente está asociado con estados de ánimo negativos y mayor riesgo de trastornos mentales”, advirtió Reyna.

Alimentos que fortalecen la mente
Entre los alimentos recomendados por el INSM “HD-HN” se encuentran:
  • Pescados ricos en omega-3 (como bonito y caballa).
  • Frutos secos (nueces, almendras).
  • Cereales integrales, frutas y verduras variadas.
  • Infusiones naturales como romero, canela y valeriana, que ayudan a reducir el insomnio y la ansiedad.
  • Alimentos ricos en vitaminas del complejo B y C, como legumbres, lácteos, cítricos y fresas.
  • Magnesio (presente en avena, maní, vegetales verdes y quinua), mineral esencial para estabilizar la actividad neuromuscular.

Desde la infancia hasta la adultez
La relación entre nutrición y salud mental empieza incluso antes del nacimiento. “Una alimentación balanceada durante el embarazo y la lactancia tiene efectos a largo plazo en la salud física y emocional del niño”, explicó la licenciada.

Se recomienda, además, que padres y cuidadores promuevan una educación alimentaria desde los primeros años, con horarios definidos, menús variados y evitando extremos entre permisividad y autoritarismo.

Actualmente, según datos del Ministerio de Salud, 2 de cada 10 niños peruanos entre 5 y 12 años presentan exceso de peso, lo que incrementa su riesgo de desarrollar problemas mentales y emocionales a futuro.

Comer saludable es cuidar tu salud mental
Una dieta balanceada no solo previene enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes o la hipertensión. También mejora el ánimo, regula el sueño y contribuye al equilibrio emocional.

“La elección de alimentos nutritivos está en nuestras manos. Comer bien es cuidarse por dentro y por fuera”, concluyó Reyna.