POR FIESTAS NAVIDEÑAS RECOMIENDAN NO INCURRIR EN GASTOS INNECESARIOS AL MOMENTO DE COMPRAR REGALOS

Nota de prensa

13 de diciembre de 2013 - 12:00 a. m.

Comportamiento desmedido puede llevar a la compra impulsiva. Lima, 13/12/2013.- “La búsqueda del ‘regalo ideal’ para familiares y amigos por fiestas navideñas, lejos de representar un gesto de cariño, puede ser para algunas personas una gran oportunidad para obtener el reconocimiento de los demás. Esa situación es frecuente por estas fechas, pues los negocios brindan un sinnúmero de ofertas por temporada y facilidades crediticias a las personas, hecho que a su vez puede fomentar un descontrol en los compradores”, señala la doctora Isabel Vásquez Suyo, médico psiquiatra del Hospital Nacional Arzobispo Loayza. La especialista precisa que este fenómeno de ‘compra compulsiva’ puede convertirse en un problema de salud mental, dado que la persona pierde la noción del gasto, a tal punto de no priorizar sus necesidades elementales, por el simple hecho de ‘quedar bien’ con las personas de su entorno o ganar ‘status’. Ello puede originar un endeudamiento progresivo a  través de distintos medios para conseguir el dinero como préstamos, uso de tarjetas de crédito, ampliación de línea crediticia, extensión de sueldo, entre otros. “El hecho de no contar con recursos económicos, puede generar en el comprador compulsivo mucha angustia, la sensación de no ser buenos proveedores, de no poder cumplir con las expectativas personales y además asumen que su imagen puede caerse o verse dañada. En casos extremos, la persona puede desarrollar cuadros de depresión”, advierte. En virtud de ello, añade, el comprador compulsivo puede mostrar otras complicaciones a nivel emocional (distracciones, culpa, impotencia, problemas de sueño y apetito) y físico (dolor de cabeza, dolor de espalda, temblores, palpitación, sensación de boca seca, sensaciones de ir al baño), como consecuencia de las descargas químicas que se producen en el organismo ante estas situaciones de estrés. “Los compradores compulsivos pueden ser capaces de ‘dilapidar’ lo que tienen, y en consecuencia, poner en peligro su integridad, trabajo y familia. En algunos casos, han llegado incluso a mendigar con el objetivo de obtener recursos”, enfatiza. ¿Cómo se puede ayudar a un comprador compulsivo? “El primer paso es lograr que el comprador compulsivo tome conciencia de sus gastos, que vea sus prioridades, sus necesidades básicas y luego identificar las circunstancias que lo llevan a comprar desmesuradamente. De ese modo, podremos desarrollar acciones que no lo lleven a caer nuevamente en este vicio como ayudarle con la administración de su dinero, anulación de tarjetas de crédito, entre otros”, explica la doctora Vásquez. Así mismo, al momento de pagar, sería recomendable que lo hiciera en efectivo, de tal forma que pueda ser consciente de la cantidad que está gastando y es importante que se encuentre acompañado por una persona de confianza. “El apoyo familiar es vital para afrontar esta situación porque, además de brindar al comprador compulsivo el soporte emocional que requiere, conocen sus costumbres y comportamiento. Si el caso fuera incontrolable, lo más recomendable sería llevarlo con el médico psiquiatra para el tratamiento de sus adicciones”, concluye.