GOLPE DE CALOR: RIESGO MORTAL PARA ADULTOS MAYORES EN VERANO
Nota de prensa

26 de enero de 2016 - 12:00 a. m.
Hidratación es principal medida preventiva durante esta época del año Lima, 26/01/16.- El verano trae consigo riesgos para la salud debido al incremento de la temperatura, siendo la deshidratación uno de los problemas más frecuentes en los adultos mayores de 65 años, el cual puede conllevar a serias complicaciones como el llamado ‘golpe de calor’. Así lo sostuvo el doctor Francisco Amado Asmat, jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Nacional Arzobispo Loayza, quien explicó que frente este hecho, el organismo intenta compensar esta deshidratación mediante la sed. “En el caso de los adultos mayores, este mecanismo se encuentra alterado, por lo que no tienen esta sensación y, en consecuencia, no ingieren la cantidad de líquido que su organismo necesita, deshidratándose aún más rápido”, advirtió el especialista. Indicó además que esta condición al hacerse constante, genera que los mecanismos reguladores de la temperatura corporal dejen de funcionar, produciéndose el ‘golpe de calor’; es decir, cuando la temperatura del organismo se eleva excesivamente y este es incapaz regularlo por sí mismo. “Ausencia de sudoración, piel enrojecida y caliente, dolor de cabeza, mareos, nauseas, taquicardia y trastornos del nivel de conciencia (desorientación, alucinaciones o confusión mental), son algunos síntomas del golpe de calor, el cual de no recibir atención oportuna, puede conllevar a la pérdida de conciencia y finalmente la muerte. De otro lado, el especialista aclaró que si bien la población adulta mayor es la más vulnerable al ‘golpe de calor, las personas que presentan algún deterioro de su salud por hábitos nocivos o por enfermedad también son propensas a este fenómeno. ¿Cómo evitar el golpe de calor en los adultos mayores? “Un adulto mayor debe hidratarse adecuadamente, bebiendo dos litros de líquidos al día aproximadamente, dependiendo de la edad y su estado de salud, sobre todo de su función renal. Por ello es importante que la persona acuda a sus controles médicos regularmente”, resaltó el Jefe del Servicio de Geriatría. Remarcó además que la temperatura corporal no solo va a aumentar por los rayos solares recibidos directamente, sino también por el calor que se acumula en las habitaciones sin ventilación. En ambos casos, el anciano podría sufrir una deshidratación. Recomendó también el uso de ropa y zapatos ligeros, así como una buena atención por parte de sus cuidadores, a fin de que reciba una nutrición e hidratación adecuada y oportuna. “Estos cambio en su estilo de vida deben ir de acuerdo a la realidad de adulto mayor, considerando su estado de salud y a fin de no generar futuras complicaciones”, finalizó.