Médicos salvan vida de bebé en el HNHU mediante cardioversión eléctrica

Nota de prensa
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4 de setiembre de 2024 - 3:48 p. m.

El Hospital Nacional Hipólito Unanue (HNHU), realizó su primera intervención de cardioversión a un paciente neonatólogo. Este procedimiento marca un avance en la atención especializada dentro del hospital y destaca la capacidad del equipo médico para manejar casos complejos en neonatología.

El paciente es un bebé neonato, que fue recibido con diagnóstico de una transposición de grandes vasos (una cardiopatía congénita compleja), y a la vez, con un diagnostico secundario de taquicardia supraventricular. Se le aplicó, en primera instancia, un medicamento llamado Adenosina para estabilizar el ritmo cardiaco, pero al no responder favorablemente se decide la intervención mediante cardioversión eléctrica.

El Dr. Michael Zárate, cardiólogo pediatra del HNHU, explica: “La cardioversión eléctrica consiste en administrar energía mediante un aparato que se llama desfibrilador, se hace una descarga para que así el corazón vuelva a su ritmo normal. Es lo que se hizo con el pequeño, felizmente todo fue un tratamiento exitoso”.

Antes de proceder con la cardioversión, se realizaron estudios del corazón del bebé, para confirmar la arritmia y descartar otras posibles complicaciones. Debido a la naturaleza delicada del paciente, un equipo multidisciplinario conformado por neonatólogos, cardiólogo pediátrico, enfermeras y personal técnico de salud especializados en cuidados neonatales se encargó de planificar cada detalle de la intervención. “Cabe resaltar que se actuó oportunamente desde el primer diagnóstico, se realizó una ecografía en el cual se diagnosticó esa cardiopatía y posteriormente el día que hizo taquicardia se tomaron los exámenes, se realizó el procedimiento el cual fue exitoso y gracias a eso el neonato está estable” menciona el Dr. Zárate.

La Dra. Kenia Zuñiga, especialista en neonatología del HNHU e integrante del equipo participante de esta intervención, resalta que el neonato estuvo bajo un monitoreo cardíaco estricto en UCI. “Veíamos las ondas graficadas en la pantalla del monitor y efectivamente después de haber realizado la cardioversión, la frecuencia cardíaca volvió a valores normales que es entre 120 y 180”.

El éxito de esta primera cardioversión en un paciente neonato dentro del HNHU no solo salvó la vida del bebé, sino que también resalta la importancia de la colaboración interdisciplinaria en la atención médica neonatal. El servicio de Neonatología se caracteriza por ser un área muy compleja y cuenta con personal altamente capacitado, lo cual permitió una atención oportuna.