Con fe y amor, bebé supera complicaciones y recibe el alta médica

Con tan solo 985 gramos al nacer y múltiples diagnósticos, este pequeño valiente ha demostrado que la fortaleza de la vida puede superar cualquier adversidad. Desde que nació enfrentó complicaciones como insuficiencia respiratoria, displasia broncopulmonar y la necesidad de permanecer intubado durante un largo periodo. Todo ello puso a prueba no solo su resistencia, sino también la fortaleza y fe de Jazmín, madre del menor.

Tras haber pasado un largo proceso en el Instituto Materno Perinatal, el pequeño ingresó al Hospital de Emergencias Pediátricas el 15 de julio, donde recibió atención especializada y cuidados intensivos por parte del equipo multidisciplinario. En nuestra institución, el bebé atravesó nuevos desafíos, como episodios de saturación y la necesidad de soporte de ventilación. Sin embargo, gracias al trabajo constante de médicos, enfermeras, técnicos en enfermería, tecnólogos médicos, personal administrativo y asistencial, su evolución fue favorable, permitiendo que poco a poco se vaya recuperando hasta que llegó la buena noticia “el alta médica”.

La madre recordó con emoción aquellos momentos difíciles que le tocó atravesar: “Tenía miedo, pero también la esperanza de que mi hijo saldría adelante. Los profesionales hicieron todo lo posible y hoy verlo estable es un milagro”.

Actualmente, el pequeño tolera la lactancia materna exclusiva y ha alcanzado un peso de 3 kilos 430 gramos, signo de recuperación significativa. La Sra. Jazmín, además, decidió donar parte de su leche a otros bebés hospitalizados, demostrando solidaridad con quienes también luchan por sobrevivir.

Este caso refleja no solo la batalla de un bebé valiente y la inquebrantable fe de su madre, quien aconseja a muchas mamás que pasan por lo mismo, tener paciencia y confiar en el proceso, sino también, el compromiso de nuestra institución en brindar una atención integral, oportuna y de calidad a los niños que enfrentan situaciones críticas de salud.