Mujer celebra su victoria tras permanecer 52 días luchando contra la COVID-19 en el Hospital Emergencia Ate Vitarte

Nota de prensa
• El esfuerzo, dedicación y ardua labor de los profesionales de la salud de este centro hospitalario hacen posible que cada vez más pacientes logren vencer esta terrible enfermedad.

11 de noviembre de 2021 - 9:54 a. m.

Los días de angustia y tristeza terminaron para los seres queridos de Florecinda, quien permaneció conectada a un ventilador mecánico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) durante 36 días; sin embargo, gracias a los esfuerzos de nuestro personal de salud y a la fortaleza de esta gran mujer, pudo ganar esta batalla y hoy regresa al lado de los suyos.

La madre de 2 hijos y costurera de oficio ingresó de emergencia a este hospital con una afectación pulmonar del 50% a causa del virus. Ello, sumado a la insuficiencia respiratoria aguda y la neumonía grave que presentaba, determinaron su pase a esta unidad crítica, a fin de brindarle un tratamiento oportuno.

“Pese a tener un diagnóstico bastante complicado, decidimos agotar posibilidades y antes de que ingrese a ventilación mecánica, recibió soporte oxigenatorio en alto flujo, pero al no ver mejoría, sus probabilidades de vencer al virus se hicieron inciertas. Felizmente, sus ganas de vivir superaron nuestras expectativas y el panorama cambió cuando la paciente fue respondiendo favorablemente al tratamiento y a las atenciones que se le brindó en esta unidad”, señaló el Dr. David Jiménez, médico intensivista del Hospital Emergencia Ate Vitarte (HEAV).

La paciente de 36 años libró una difícil pero no imposible batalla, de la cual salió victoriosa. Ahora deberá continuar su rehabilitación en casa realizando ejercicios de terapia respiratoria y física hasta poder retomar sus labores con normalidad.

A su salida, Florecinda, aún con la voz débil, agradeció esta nueva oportunidad de vida y destacó el profesionalismo del personal asistencial del HEAV, a quienes dijo admirar por su trabajo en equipo y su lucha constante para lograr la recuperación de todos los pacientes.

“Agradecida porque, a pesar de mi nerviosismo y mi angustia, supieron cuidarme bien y estoy muy agradecida por esa dedicación y paciencia. Cuídense mucho y que Dios los bendiga siempre”, agregó la valiente paciente.