¡De regreso a casa! Madre Ateña vence a la Covid-19 tras permanecer más de dos semanas en la Unidad de Cuidados Intermedios

Nota de prensa
• La valiente mujer ingresó a este nosocomio el pasado 01 de marzo, presentando fiebre, dolor de cabeza y saturando 70%.

1 de abril de 2021 - 11:25 a. m.

Fueron más de 20 días los que Karina estuvo lejos de su pequeño hijo de 9 años, pero gracias a los cuidados de los especialistas de salud del Hospital Emergencia Ate Vitarte, pudo dejar el ventilador mecánico en la Unidad de Cuidados Intermedios (UCIN) y ganar la batalla contra este letal virus.

Debido a la insuficiencia respiratoria aguda que padecía, la mujer de 34 años, ingresó de emergencia a este nosocomio, donde recibió tratamiento de alto espectro, específico para Covid-19 y asistencia ventilatoria mecánica invasiva en la Unidad de Cuidados Intermedios (UCIN), así lo informó la Dra. Diana Matos, especialista en emergencias y desastres de este hospital.

“La paciente ingresó con un compromiso pulmonar del 50%, neumonía por Covid-19 e insuficiencia respiratoria aguda, pero gracias al cuidados de nuestro personal de salud, logramos establecerla y ahora puede respirar de manera espontánea”, agregó la especialista.

Es así que, la esperanza de volver a encontrarse con los suyos hizo que Karina lograra el alta médica el pasado 24 de marzo. A su salida, solo tuvo palabras de agradecimiento hacia nuestro personal de salud, quienes en todo momento le brindaron una atención oportuna y de calidad.

“Estoy agradecida con los médicos, enfermeros y todo el personal de este hospital. Les agradezco mucho porque gracias a ustedes he vuelto a vivir. Definitivamente esta es una nueva oportunidad de vida”, sostuvo la paciente quien deberá seguir las indicaciones del médico para continuar con su recuperación en su hogar.

Asimismo, la vecina del distrito de Ate, pidió a la población no bajar la guardia, cuidarse, lavarse las manos y evitar salir de sus hogares para no exponerse; además de usar correctamente la mascarilla y el protector facial. “Esto no es una broma, soy un testimonio viviente y a Dios gracias, me he salvado”, finalizó.