Madre ateña con COVID-19 salió de la Unidad de Cuidados Intermedios del Hospital Emergencia Ate Vitarte

El esfuerzo y ardua labor de nuestros profesionales de la salud siguen permitiendo obtener resultados esperanzadores. Este es el caso de Carmen, quien luego de de permanecer internada en la Unidad de Cuidados Intermedios (UCIN) debido la Covid-19 fue dada de alta del Hospital Emergencia Ate Vitarte (HEAV).

La valiente vecina del distrito de Ate ingresó a este nosocomio el pasado 13 de febrero, presentando 33 semanas de gestación, además de insuficiencia respiratoria aguda por la Covid-19 y neumonía severa.

Ante este difícil caso y luego de una junta médica, se determinó realizar una cesárea de emergencia y trasladar a la paciente a UCIN, donde permaneció 9 días recibiendo soporte oxigenatorio a través de un ventilador mecánico, así lo indicó la Dra. Sara Castañeda, médico ginecóloga del HEAV.

“Este logro es gracias al esfuerzo de todo el equipo multidisciplinario de la salud que hizo posible que la paciente se recuperara rápidamente y pueda retornar a su hogar al lado de su familia”, añadió la especialista.

Por su parte, la Dra. Jessika León, médico pediatra y encargada del área intermedia de Neonatología de este centro hospitalario, señaló que este caso en particular representaba un gran reto para los profesionales de la salud, ya que en todo momento estuvieron pendientes y atentos para salvar la vida de la madre y del recién nacido.

“Se recibe al neonato pretérmino, cuyo peso era de 1.940 kg, con un diagnóstico de apnea neonatal y depresión severa, pero felizmente se recuperó poco a poco y fue derivado a un hospital de mayor complejidad hasta completar totalmente su recuperación. En todo momento procuramos brindar una atención humanizada y de calidad porque cuidamos y atendemos a sus bebés como si fueran nuestros”, agregó la Dra. León.

Es así que, a su salida, el 01 de marzo, la feliz madre, quien se reencontró con su esposo, no dudó en manifestar su agradecimiento a los médicos, enfermeros y técnicos que hicieron posible que ella puede volver a casa y ver nuevamente a sus hijos.

“Estoy muy agradecida por el cuidado que recibí mientras estuve aquí. La atención que recibí del equipo de este hospital fue muy buena, con mucha calidad y calidez. Gracias a Dios y a estos ángeles, hoy puedo regresar a casa al lado de mi familia”, finalizó Carmen, muy emocionada.

Es importante resaltar que, la atención oportuna y la aplicación de estrictas medidas de bioseguridad, permitieron que la gestante con Covid-19 traiga al mundo a su prematuro bebé, evitando que también se contagie.