Piura: Usuarios de Qali Warma promueven prácticas de vida saludable y cuidado del medio ambiente
Nota de prensa
25 de julio de 2024 - 5:49 p. m.
“Yanapaquis ambientales” o protectores ambientales es el nombre del proyecto innovador donde participan 71 niñas y niños, usuarios del Programa Nacional de Alimentación Escolar Qali Warma, de la institución educativa inicial n.°1356 Mi Mundo de Colores, ubicada en el caserío Ejidos de Huan en el distrito de Piura.
Este proyecto, que es liderado por la directora y presidenta del Comité de Alimentación Escolar (CAE), Milagros Calero Pinta, se realiza en el marco del diseño nacional de educación básica regular y tiene cinco acciones estrategias. Una de ellas es la creación de espacios de vida a través de la instalación de un huerto escolar como un recurso pedagógico para el aprendizaje.
A través del huerto, los niños aprenden de manera práctica y divertida sobre el origen y producción de los alimentos, compostaje y reciclaje, valor nutricional de los alimentos, uso racional del agua, modos de preparación, entre otros. “Desde la escuela se promueve prácticas alimentarias saludables, generando en los estudiantes conocimientos y habilidades para hacer las elecciones alimentarias adecuadas, saludables y conscientes”, remarcó la directora.
También se trabaja el manejo de residuos sólidos. Por ejemplo, con la ayuda de sus padres y maestros elaboran pisos o tapetes de periódico reciclado; además de muebles y estantes con celdas de huevos y jabas de frutas para ser usados en los sectores de las aulas y la biblioteca.
A través de la estrategia mido y reduzco Mi huella de carbono y la de mi cole-Ahorro energético, se ha realizado campañas sobre el ahorro de energía. “Los estudiantes aprenden por qué es importante desenchufar los equipos electrónicos que no se utilizan o apagar los focos de luz que no usan”, informó la maestra.
Vida y verde – VIVE es la estrategia con la que el proyecto busca el fortalecimiento, valoración y uso de las áreas naturales como recurso pedagógico, realizando campañas de sensibilización del cuidado del medio ambiente, de limpieza en la escuela y sus alrededores, adopción de una planta y el cuidado y ahorro del agua.
Todas estas buenas prácticas son replicadas en cada una de las casas de los escolares. Junto a sus progenitores instalan sus propios huertos familiares que son abonados con compost elaborado con los residuos orgánicos obtenidos de la preparación de alimentos o el consumo de frutas. “Estas pequeñas acciones de los estudiantes y sus familias en la escuela y hogar suman en el cuidado y protección de nuestro entorno y contribuimos a que nuestros estudiantes se sientan contentos y felices”, enfatizó.
Finalmente, la maestra informó que el proyecto incluye el cuidado integral de niñas y niños, mediante la promoción de prácticas de higiene, como el lavado de manos, cepillado de dientes y alimentación saludable, de manera articula con Qali Warma y el centro de salud de la zona.
Estas acciones involucran a toda la comunidad educativa, donde se promueve la integración de la familia en el quehacer de la escuela y el desarrollo físico y emocional de los estudiantes, a través de talleres de manualidades, campañas, dramatizaciones, videos, entre otros.
Este proyecto, que es liderado por la directora y presidenta del Comité de Alimentación Escolar (CAE), Milagros Calero Pinta, se realiza en el marco del diseño nacional de educación básica regular y tiene cinco acciones estrategias. Una de ellas es la creación de espacios de vida a través de la instalación de un huerto escolar como un recurso pedagógico para el aprendizaje.
A través del huerto, los niños aprenden de manera práctica y divertida sobre el origen y producción de los alimentos, compostaje y reciclaje, valor nutricional de los alimentos, uso racional del agua, modos de preparación, entre otros. “Desde la escuela se promueve prácticas alimentarias saludables, generando en los estudiantes conocimientos y habilidades para hacer las elecciones alimentarias adecuadas, saludables y conscientes”, remarcó la directora.
También se trabaja el manejo de residuos sólidos. Por ejemplo, con la ayuda de sus padres y maestros elaboran pisos o tapetes de periódico reciclado; además de muebles y estantes con celdas de huevos y jabas de frutas para ser usados en los sectores de las aulas y la biblioteca.
A través de la estrategia mido y reduzco Mi huella de carbono y la de mi cole-Ahorro energético, se ha realizado campañas sobre el ahorro de energía. “Los estudiantes aprenden por qué es importante desenchufar los equipos electrónicos que no se utilizan o apagar los focos de luz que no usan”, informó la maestra.
Vida y verde – VIVE es la estrategia con la que el proyecto busca el fortalecimiento, valoración y uso de las áreas naturales como recurso pedagógico, realizando campañas de sensibilización del cuidado del medio ambiente, de limpieza en la escuela y sus alrededores, adopción de una planta y el cuidado y ahorro del agua.
Todas estas buenas prácticas son replicadas en cada una de las casas de los escolares. Junto a sus progenitores instalan sus propios huertos familiares que son abonados con compost elaborado con los residuos orgánicos obtenidos de la preparación de alimentos o el consumo de frutas. “Estas pequeñas acciones de los estudiantes y sus familias en la escuela y hogar suman en el cuidado y protección de nuestro entorno y contribuimos a que nuestros estudiantes se sientan contentos y felices”, enfatizó.
Finalmente, la maestra informó que el proyecto incluye el cuidado integral de niñas y niños, mediante la promoción de prácticas de higiene, como el lavado de manos, cepillado de dientes y alimentación saludable, de manera articula con Qali Warma y el centro de salud de la zona.
Estas acciones involucran a toda la comunidad educativa, donde se promueve la integración de la familia en el quehacer de la escuela y el desarrollo físico y emocional de los estudiantes, a través de talleres de manualidades, campañas, dramatizaciones, videos, entre otros.