SENASA capacita a productores en Buenas Prácticas Agrícolas para la cosecha de alimentos sanos e inocuos
Nota de prensaDesde su competencia, el SENASA cumple con sus funciones para que los alimentos que llegan a los hogares peruanos sean sanos, seguros y aptos para el consumo humano.

Fotos: SENASA
17 de diciembre de 2025 - 2:01 p. m.
El Servicio Nacional de Sanidad Agraria – SENASA precisó que, en el marco de sus competencias, cumple con sus funciones mediante la capacitación sobre Buenas Prácticas Agrícolas, a nivel nacional; sin embargo, reiteró que la inocuidad agroalimentaria es un asunto de todos, desde los agricultores, los procesadores de alimentos, los distribuidores, los minoristas, los mayoristas de alimentos y los consumidores.
En ese sentido, precisó que la Ley de Inocuidad de los Alimentos (Decreto Legislativo N.º 1062), la Ley N.º 29571 – Código de Protección y Defensa del Consumidor, así como la Norma Sanitaria para Mercados de Abasto de Alimentos del Ministerio de Salud (MINSA) y el Código Penal, coinciden al establecer que los comercializadores de alimentos son responsables de garantizar la inocuidad de lo que venden, lo que contempla la necesidad de exigir a sus proveedores la certificación en Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) o, alternativamente, análisis de residuos de plaguicidas que acrediten el cumplimiento de la normativa vigente.
Por otro lado, señalaron que el marco legal vigente es claro al señalar que la vigilancia y control de la inocuidad de los alimentos agropecuarios en el transporte, comercio y expendio corresponde a los gobiernos locales, conforme a lo dispuesto en la Ley de Inocuidad de los Alimentos y la Ley N.º 27972 – Ley Orgánica de Municipalidades. “Estas competencias no son discrecionales ni transferibles, y deben ejercerse de manera efectiva en coordinación con las autoridades nacionales”, indicó que el director de Insumos Agropecuarios e Inocuidad Agroalimentaria del SENASA, Josué Carrasco.
Desde el SENASA, existe el compromiso permanente de seguir trabajando de manera articulada con todas las instituciones involucradas; enfocados en cumplir con la regulación, fiscalización, capacitación y asistencia técnica en materia de sanidad agraria, orientación en el uso responsable de plaguicidas y promoción de las Buenas Prácticas Agrícolas con los agricultores. No obstante, resulta indispensable que cada actor de la cadena agroalimentaria, asuma plenamente las responsabilidades que la ley le asigna, evitando interpretaciones erróneas que debilitan el sistema de control sanitario.
“La protección de la salud pública y la seguridad alimentaria del país exigen corresponsabilidad, cumplimiento normativo y una comunicación responsable basada en el marco legal vigente. Solo así se garantizará que los hogares peruanos accedan a alimentos sanos e inocuos.” puntualizó Josué Carrasco.