Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú

El Índice Oceánico Niño (ONI) centrado en enero de 2025, reportó un valor de -0.6°C en la categoría fría débil, manteniendo valores negativos desde agosto 2024. Además, para el mes de febrero 2025 el promedio mensual de la anomalía de la TSM de la región 3.4 fue de 0.59°C persistiendo en las condiciones frías (fuente ERSSTv51); sin embargo, desde fines de febrero 2025 hasta lo que va de marzo 2025 se vienen incrementando los valores de TSM, influenciados por el debilitamiento de vientos del este. Respecto al Pacífico oriental (región Niño 1+2) El ICEN centrado en enero 2025 alcanzó el valor de 0.0 °C en la condición neutra. En febrero de 2025 se reportó una anomalía de TSM de +0.37°C (según el ERSSTv52) con un incremento significativo de anomalías de TSM en la región 1+2; Este calentamiento ha llegado a sus valores máximos entre fines de febrero e inicios de marzo, para luego tener un descenso debido al fortalecimiento del APS, no obstante mantiene las anomalías cálidas. Durante febrero 2025, la circulación de Walker mostró, en promedio, una convección en el Pacífico Oriental y la Amazonía de Sudamérica, lo que favoreció los superávits de lluvias que se dieron en la costa peruana y en la vertiente oriental. Este patrón persistió en marzo 2025, sin embargo, los valores de anomalías de TSM en la costa peruana fueron descendiendo, por ende, las anomalías de lluvias positivas en la costa disminuyeron notablemente. La sierra sur oriental se vio más favorecida debido a la mayor advección de humedad en niveles altos que propició superávits de lluvias. El Anticiclón del Pacífico Sur (APS) en febrero tuvo episodios de debilitamiento, lo que favoreció incrementos en las anomalías de TSM costeras y propició superávits de lluvias que llegaron a registrar hasta +800% en la costa central, sur, parte de la costa norte y la sierra occidental. En lo que va de marzo el APS retornó a su posición climática y recuperó sus valores de presión lo que favoreció un descenso de anomalías de TSM y propició menores anomalías de lluvias en la costa. Los valores de velocidad potencial divergentes predominaron en febrero 2025, lo que sumado a un calentamiento de la TSM en la costa peruana favorecieron superávits de lluvias a lo largo de la costa peruana, la sierra occidental, la selva y parte de la sierra oriental del Perú.