Discurso de la señora Canciller Ana Cecilia Gervasi con ocasión del 202° aniversario del Ministerio de Relaciones Exteriores

Buenas tardes, señora Presidenta de la República, Dina Ercilia Boluarte Zegarra; señor Viceministro de Relaciones Exteriores, Embajador Ignacio Higueras; señor Presidente del Congreso de la República, Alejandro Soto Reyes; señores miembros de la mesa directiva del Congreso de la República, excelentísimo Monseñor Paolo Rocco Gualtieri, Decano del Cuerpo Diplomático acreditado en el Perú; señoras y señores congresistas de la República; señora Vicepresidenta del Parlamento Andino, Leslye Lazo; señor Secretario General de Relaciones Exteriores, Embajador Elmer Schialer; señoras y señores excancilleres, exviceministros y exsecretarios generales del Ministerio de Relaciones Exteriores; Embajadoras y Embajadores Directores Generales del Ministerio de Relaciones Exteriores; señores presidentes de las Asociaciones de funcionarios del Servicio Diplomático en actividad y en retiro; señoras y señores funcionarios Diplomáticos y administrativos del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Es muy grato dirigirme a ustedes en este importante día en el que conmemoramos los 202 años de creación del Ministerio de Relaciones Exteriores, noble institución, nacida con la República, cargada de historia, tradición y vocación patriótica y de servicio al Perú. Quiero iniciar estas palabras agradeciendo a la señora Presidenta Constitucional de la República del Perú, Dina Boluarte Zegarra, por honrarnos hoy con su presencia. Usted señora presidenta de acuerdo con la Constitución dirige la política exterior y las relaciones internacionales de manera que su presencia es muy significativa.

En el devenir histórico de nuestra República, el Ministerio de Relaciones Exteriores y su servicio diplomático han sido fundamentales en el resguardo de los intereses permanentes del Perú, como la defensa de nuestro territorio, incluido nuestro dominio marítimo; la búsqueda de la unidad regional a través del diálogo y el respeto mutuo; la proyección de sus valores y principios irrenunciables como la búsqueda de la paz, la seguridad global y la solución pacífica de las controversias; el irrestricto respeto al derecho internacional; el fortalecimiento de instituciones democráticas; y el respeto a las libertades fundamentales y los derechos humanos.

Gracias a los esfuerzos permanentes del Servicio Diplomático de la República, nuestro país se ha constituido a nivel internacional como un actor constructivo, dialogante, democrático, solidario, comprometido con el Estado de derecho y la separación de poderes, con el orden constitucional e institucional y con los altos valores de la paz y la justicia social.

Queridos colegas,

Hoy, en el día en que conmemoramos doscientos dos años de creación institucional, estimo importante reflexionar sobre el compromiso y la contribución que cada uno de nosotros puede hacer en favor de nuestro país y nuestra institución.

Cuando fui convocada por la señora presidenta para asumir como Ministra de Relaciones Exteriores, rememoré el juramento que hice al iniciar mi carrera como funcionaria diplomática, compromiso compartido por todos los miembros de esta bicentenaria casa. Juramos por los intereses nacionales, por nuestro honor, por el Perú y, con ello en mente, tuve la clara convicción de que aceptar el encargo con el que he sido honrada, era y es un deber indeclinable para con mi país, y para con mi institución.

Como diplomáticos peruanos tenemos la obligación y el deber de responder al llamado de la patria. Nos preparamos para servirla con firmeza, y sin titubeos. Por ello, invito a cada uno de ustedes a que renovemos el juramento que hicimos a nuestra institución y a nuestro país. Esta renovación debe motivarnos a seguir viendo con optimismo y esperanza el futuro del Perú y propiciar las transformaciones necesarias para continuar siendo un servicio diplomático de vanguardia.

Este mismo compromiso debe estar en todos los trabajadores de nuestro Ministerio, servidores administrativos nombrados y contratados, cuyo aporte y apoyo son invaluables. La Cancillería no sería lo que es hoy sin el trabajo que realiza cada uno de los que laboran en esta institución.

Desde el inicio de esta gestión, han sido meses de arduo trabajo, sin pausas, con momentos sensibles y muy difíciles de enfrentar. Han sido meses en los que, gracias al profesionalismo de los integrantes de Torre Tagle, hemos podido afrontar y resolver, satisfactoriamente, grandes desafíos de una coyuntura nacional e internacional compleja.

En este periodo hemos llevado a cabo una intensa agenda internacional orientada por una política exterior independiente, principista y pragmática que, a corto plazo, bajo el liderazgo de la señora Presidenta, ha logrado restaurar la confianza en nuestro país, afectada por la crisis provocada por el golpe de estado del 7 de diciembre pasado.

Durante este tiempo organizamos diversas visitas oficiales a nivel bilateral y participamos en foros internacionales, tales como la cumbre de la CELAC en Buenos Aires, la Cumbre Iberoamericana en Santo Domingo, la reciente Cumbre CELAC-Unión Europea en Bruselas, entre otros, que nos permitieron esclarecer los acontecimientos sucedidos en nuestro país y, principalmente, transmitir a la comunidad internacional las seguridades de que el Perú continúa siendo un socio estratégico y confiable.

En cuanto a nuestros procesos de integración regional, acabamos de retornar de Santiago de Chile en donde recibimos, en nombre del Perú, la Presidencia Pro Tempore de la Alianza del Pacífico. La continuidad de los trabajos del proceso de integración regional más exitoso de los últimos años ha sido posible gracias a la diplomacia profesional de las cancillerías de los cuatro países. En los próximos días la señora Presidenta anunciará formalmente los lineamientos y prioridades de nuestra presidencia.

Respecto a la Comunidad Andina, estamos próximos a concluir el ejercicio de nuestra Presidencia Pro Tempore cediendo la posta a Bolivia. En el periodo de nuestra gestión promovimos una agenda que incluyó diversas actividades académicas, económicas y culturales, que estuvieron dirigidas a fortalecer el vínculo de pertenencia del ciudadano andino con su bloque regional y conocer los beneficios que este le ofrece.

Con la intención de iniciar una reforma profunda que procure mayores beneficios de la CAN a sus ciudadanos, impulsamos la conformación del "Grupo de Trabajo para la Evaluación de la Reforma, Modernización, Fortalecimiento y Reingeniería de la CAN". Los resultados de los trabajos de este grupo serán los insumos clave para las futuras decisiones que adoptemos.

Asimismo, durante nuestra presidencia, se reactivó el Grupo de Alto Nivel de Integración y Desarrollo Fronterizo, el Comité Andino de Autoridades Ambientales y el Consejo Andino de Ministros del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible. Dichos espacios permitirán identificar y adoptar acciones conjuntas y concretas en los temas que en ellos se abordan.

En lo que respecta a nuestro proceso de adhesión a la OCDE, la decisión y compromiso de este gobierno en la consecución de este objetivo de Estado, que busca promover un mayor fortalecimiento institucional del país y brindar mejores servicios públicos para todos los peruanos, es incuestionable.

El Perú dio un gran paso en esta aspiración, conforme a nuestra hoja de ruta, con la entrega del memorando inicial al Secretario General de dicha organización el pasado 7 de junio, junto con el Premier y el Ministro de Economía. Esto no hubiese sido posible sin el trabajo de cooperación y coordinación interinstitucional para analizar más de 240 instrumentos jurídicos de la OCDE en función a nuestra legislación nacional.

Por otra parte, el reciente depósito ante la OMC del instrumento de aceptación del Perú al Acuerdo Sobre Subvenciones a la Pesca ha sido un hito histórico de nuestra política exterior.

Personalmente, ha sido una satisfacción haber participado en diferentes momentos de su gestación: primero como funcionaria, luego como Viceministra de Comercio Exterior y ahora como Canciller, cerrando un círculo de más de 20 años con un acuerdo de vanguardia que contribuirá a la sostenibilidad de nuestros océanos y los medios de subsistencia de nuestros pescadores artesanales.

En cuanto al fenómeno migratorio, como refirió nuestra Presidenta en su discurso de 28 de julio, destacó el diálogo diplomático que llevamos a cabo a nivel regional y bilateral, particularmente con Chile y Venezuela, que permitió resolver de manera efectiva la crisis que se originó en el paso fronterizo de Tacna y Arica.

El tema migratorio, que impacta a todos los países de nuestra región, debe abordarse desde una perspectiva sistémica, multidimensional y alineada con el principio de una migración segura, ordenada y regular.

Los aportes del Perú sobre esta materia son muy valiosos, dada nuestra condición de país receptor y emisor de migrantes.

A inicios de año, la señora Presidenta sostuvo la primera reunión de trabajo virtual con nuestros cónsules. Esta actividad sin precedentes permitió informar a nuestra mandataria sobre las necesidades de nuestros connacionales de todas las regiones del mundo.

Atendiendo a la instrucción de la señora Presidenta de ofrecer servicios de calidad con rostro humano, nuestras misiones consulares han continuado brindando asistencia humanitaria, en lo que va del año, a más de diez mil connacionales en el extranjero en situación de vulnerabilidad, como son los casos de víctimas de trata de personas, violencia de género e indigencia, entre otros. De igual manera, han desarrollado un trabajo de promoción de los logros y capacidades de nuestros más de 3 millones de connacionales que viven en el exterior.

En el campo de la interoperabilidad y la digitalización de los servicios consulares, hemos trabajado estrechamente con la Sunarp, para registrar de manera electrónica y en tiempo real, documentación generada por las oficinas consulares. De la misma manera, con el Reniec iniciamos el plan piloto del sistema automatizado de los registros civiles, que permitirá que las actas de nacimiento, matrimonio y defunción emitidas en los consulados peruanos puedan ser registradas en línea, todo lo cual reducirá sustancialmente los tiempos de atención.

En cuanto al área de infraestructura de nuestro Ministerio, inauguramos esta mañana el nuevo local de atención consular en Lima, ubicado en la anterior sede de la Bolsa de Valores, el cual permitirá ofrecer servicios de mayor calidad y eficiencia.

Además de lo señalado, logramos la aprobación de la Política Nacional de Cooperación Técnica Internacional al 2030. Es necesario destacar que, sobre la base de esta política, con el apoyo de las oficinas desconcentradas de la Cancillería, la Agencia Peruana de Cooperación Internacional y nuestras misiones en el exterior, redoblaremos esfuerzos para focalizar los requerimientos de cooperación internacional en atención a las necesidades de nuestro país, sobre todo frente al Fenómeno de el Niño, y buscaremos ampliar nuestra oferta de cooperación técnica.

En el ámbito de la gestión administrativa, y con el apoyo fundamental del Ministerio de Economía y Finanzas, continuamos trabajando en la revigorización de los medios presupuestarios disponibles, a fin de dotar a nuestra Cancillería y misiones de las herramientas necesarias para la adecuada defensa y promoción de los intereses nacionales en el exterior. Desde que asumí el cargo, me he preocupado por repotenciar a la Cancillería tras las drásticas limitaciones impuestas durante la pandemia.

Estos avances a nivel de recursos no sólo aseguran la operatividad de nuestro Ministerio, sino que permiten también dar un salto cuantitativo en materia de política exterior y gestión diplomática. Este año tenemos prevista la reapertura de nuestra embajada en Nairobi, Kenia y el establecimiento de dos nuevos consulados de carrera: en Phoenix y en Salt Lake City, Estados Unidos.

A nivel nacional, estamos también involucrados en la construcción de dos centros binacionales de atención fronteriza con el Brasil y con Colombia, mientras que, en el marco de las obligaciones del Perú derivadas del Tratado Antártico y nuestros intereses de política exterior, la Cancillería viene desplegando esfuerzos para la construcción de la nueva base del Perú en la Antártida.

Señoras y señores,

Me he permitido realizar este breve recuento de algunos de los logros sustantivos alcanzados en apenas 8 meses de gestión, a fin de ilustrar la forma en la que trabajamos, produciendo resultados concretos y, asimismo, reafirmar, con plena convicción, que el Perú está de regreso, y con él, su diplomacia profesional, propositiva y proactiva.

Ahora quisiera referirme brevemente a nuestros próximos pasos:

La señora Presidenta, en su discurso del pasado 28 de julio, anunció la decisión de incorporar un décimo eje sobre política exterior a la Política General de su gobierno, lo que pone de manifiesto la relevancia trascendental y especialización de la labor que realiza la Cancillería.

Este nuevo eje estará orientado a contribuir con el bienestar de nuestros compatriotas dentro y fuera de nuestras fronteras, promover el desarrollo económico de nuestro país, proyectarnos como potencia cultural y creativa, y consolidar nuestro liderazgo en la lucha frente a las amenazas globales.

Para alcanzar estos objetivos, en atención a las directrices de nuestra señora presidenta, hemos establecido algunas acciones prioritarias enmarcadas en una política exterior independiente, principista y pragmática, que guiarán el desarrollo de una agenda positiva y propositiva para los próximos años:

Continuaremos reafirmando al Perú como un país que respeta el derecho internacional, fortalece la democracia y el Estado de derecho, y previene y combate la corrupción.

Promoveremos una política de integración vecinal y latinoamericana, sin exclusiones y con pragmatismo, que incluya un sólido liderazgo en nuestros mecanismos de integración regional como la Comunidad Andina y la Alianza del Pacífico. He dispuesto que en estos bloques impulsemos iniciativas en favor de nuestras micro, pequeñas y medianas empresas, particularmente aquellas lideradas por mujeres, pues ellas representan la base social y mayor fuente generadora de empleo.

Fortaleceremos el multilateralismo y sus foros para afrontar los desafíos globales, como las amenazas a la paz y seguridad internacionales, el cambio climático y la protección del medioambiente, la superación de la pobreza, la desigualdad y la inequidad de género, la delincuencia organizada transnacional, las pandemias, el narcotráfico, la trata de personas, entre otros.

Desplegaremos acciones diplomáticas a nivel regional y global dirigidas a la protección y conservación de nuestra Amazonia frente a los efectos adversos del cambio climático y la contaminación, con una aproximación social que incluya a nuestros pueblos originarios, bajo el enfoque de una “Amazonia con rostro humano”. En lo inmediato, en coordinación con los sectores competentes, este enfoque humano será incorporado como un aporte del Perú a los trabajos de la próxima Cumbre de Jefes de Estado de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica, que se celebrará en Belém do Pará, los días 8 y 9 de agosto.

La pertenencia del Perú al foro APEC representa un hito relevante para la política exterior peruana, permitiendo que nuestra economía consolide su proyección internacional en la región del Asia - Pacífico, la más innovadora, dinámica y de mayor crecimiento del mundo.

En noviembre próximo, que asumiremos por tercera vez la presidencia de este foro para 2024, impulsaremos una agenda para liderar temas de interés colectivo con un impacto positivo en nuestra política interna, como son los asuntos de comercio e inversión, innovación y crecimiento sostenible, con especial énfasis en la inclusión de las pymes y mujeres emprendedoras en la economía digital.

Continuaremos promoviendo al Perú como un socio confiable para el comercio, la inversión y el turismo, con el objetivo de aumentar la competitividad y la productividad de la industria nacional, priorizando la internacionalización de las PYME, contribuyendo así a la reactivación de la economía. Para tal fin he dispuesto que nuestras misiones en el exterior, en sus diversas actividades, difundan mensajes claros sobre el ecosistema económico que ofrece el Perú, el cual está constituido por una red de acuerdos comerciales y de promoción de inversiones, su compromiso con el sistema multilateral del comercio y membresía en los bloques de integración regional como la Alianza del Pacífico y la Comunidad Andina, su proceso de adhesión a la OCDE, nuestra legislación favorable para los negocios, prudente disciplina fiscal, solidez macroeconómica a nivel regional y garantías constitucionales como la protección de la propiedad privada.

Profundizaremos la acción diplomática en el sistema multilateral del comercio, siendo partícipes de una nueva regulación internacional que atienda la actual interacción entre comercio, inversiones, tecnología y medioambiente. Para dicho fin, he dispuesto que, en coordinación con los sectores nacionales competentes, se impulse la participación peruana en las negociaciones sobre facilitación de las inversiones para el desarrollo, comercio electrónico y los aspectos medioambientales relacionados con el comercio.

Promoveremos a nivel regional y multilateral, en nuestra condición de país receptor y emisor de migrantes, una respuesta conjunta y pragmática, sin exclusiones y liberada de sesgos ideológicos, para conseguir resultados efectivos ante una problemática sistémica y multidimensional que impacta a todos los países del mundo. En ese sentido, impulsaremos una política migratoria -regional y consensuada- en línea con estos objetivos, en el marco de nuestra presidencia de la conferencia sudamericana de migraciones y otros mecanismos y foros regionales.

A nivel administrativo, priorizaremos la digitalización y modernización continua de la cancillería, dando un mayor énfasis a proveer servicios consulares modernos y de calidad. Para ello, ya contamos con los lineamientos para la implementación del gobierno digital en las oficinas consulares, que nos permitirá contar con una mesa de partes virtual en los consulados y, además, se viene adecuando progresivamente el sistema de transmisión en línea de documentos consulares a registros públicos.

Afianzaremos el liderazgo del Perú en la región, con proyección global, en la defensa y promoción del gran potencial de nuestra cultura, gastronomía, biodiversidad y creatividad. Asimismo, nuestro país, por su orgulloso legado histórico, mantiene una firme lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales. Por ello, organizaremos la tercera edición del “Foro Cusco” en el 2024. Este importante evento tiene por objetivo propiciar el diálogo y la reflexión para la protección de los bienes culturales.

En la última sesión del Consejo Nacional de Desarrollo e Integración Fronteriza -que tuve la honra de presidir- acordamos actualizar la política nacional en esa área, con la finalidad de hacerla más eficiente y adaptada a los tiempos actuales en favor de nuestros gobiernos regionales y locales de frontera. Para dicho fin se creó un grupo de trabajo multisectorial, liderado por Cancillería, que estará a cargo de presentar la propuesta de la nueva política.

He instruido a los equipos de este ministerio priorizar las reformas necesarias que permitan generar acciones concretas y medibles para el desarrollo sustentable de nuestros compatriotas que residen en las zonas de frontera.

Queridos colegas y amigos,

Las prioridades que he reseñado deberán guiar los trabajos de nuestra bicentenaria Cancillería en los próximos años, sin perjuicio de adecuarnos a las futuras necesidades de nuestro país.

El Perú y su diplomacia profesional están de regreso.

La diplomacia de Torre Tagle, que tengo el orgullo de integrar, siempre estará al servicio de los intereses permanentes del Perú, y lo hará de manera decidida. Somos un servicio con tradición y mística, orgulloso de su prestigiosa historia, pero que no pretende vivir de sus glorias pasadas. Tenemos una clara visión hacia el futuro de nuestro país.

En este esfuerzo, corresponde a esta generación, de la mano de nuestros funcionarios mayores, liderar este proceso y guiar a nuestros jóvenes colegas en ese rumbo. debemos continuar forjando un servicio diplomático capaz de adaptarse a los retos que plantea el actual escenario internacional. de lo contrario, no podremos cumplir con las justas expectativas de nuestros compatriotas.

No puedo concluir estas palabras sin expresar mi especial reconocimiento al valioso consejo profesional de mi Viceministro, Jefe del Servicio Diplomático, el Embajador Ignacio Higueras, así como al impecable trabajo del Embajador Elmer Schialer, al frente de nuestra Secretaría General.

Asimismo, extiendo mi especial agradecimiento a todos los colegas de las distintas generaciones, al personal administrativo y de servicios, que día a día contribuyen en esta causa común. Confío en seguir contando con esa misma dedicación y compromiso, por parte de todos ustedes.

Agradezco una vez más a la señora presidenta por honrarnos con su presencia y sus palabras que nos motivan a continuar en nuestra permanente misión en favor del Perú y nuestros connacionales.

Les reitero mi invocación a la responsabilidad y al compromiso de cada uno en este esfuerzo colectivo en favor de los intereses permanentes de nuestro país. El concurso de todos es necesario para alcanzar estos objetivos que redundarán en el beneficio y desarrollo de nuestra patria, sin dejar a nadie atrás.

El Perú siempre estará primero.

Feliz día del Ministerio de Relaciones Exteriores.