Plaza Mayor de Lamas: “El encuentro de dos culturas”

La plaza mayor de Lamas se ubica en el Jr. San Martín cuadra 08 y es uno de los puntos más concurridos por su población local y visitantes, además, está rodeada por el local de la municipalidad y la iglesia principal de la ciudad. Es la segunda parada del recorrido turístico de Lamas, y se encuentra en el Guión Interpretativo del Recorrido Turístico de Lamas y el Wayku, herramienta elaborada el componente IV “Eficiente Gestión Turística” del proyecto Lamas, ejecutado por el Gobierno Regional San Martín, mediante la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo.

Quizá, muchos no se den cuenta de la cantidad y significado de cada estatua ubicada estratégicamente en todo el espacio, por lo que vamos a describir cada una de ellas: La mujer Kechwa Lamista, es un homenaje a la labor de madre, sabia y manantial de cultura de la mujer originaria del lugar. La blusa blanca, falda negra y pañuelos de colores, además de coloridos ganchos en el cabello, muestran a la mujer Kechwa como es en su día a día.

“El chapanero” o cazador lamista, es el símbolo del varón proveedor, creador y portavoz de diferentes leyendas y cuentos mitológicos productos de sus vivencias e imaginación, de sus dietas y purgas, además de su cosmovisión, que con mucha dedicación transmitía a sus hijos, vecinos y velorios.

La estatua denominada “Dama colonial”, mujer y madre, junto a su esposo fue participe del desarrollo socioeconómico de la ciudad de Lamas. Fue comerciante por excelencia, criaron a sus hijos gracias a esta actividad convirtiéndolos en profesionales de la nación.

“La lavandera”, esta estatua muestra la actividad económica de muchas de las mujeres lamistas, quienes daban este servicio a las familias de mayor posición económica. Con esta actividad sostenían a sus familias.

En quinto lugar, está el “pilonero”, fue una profesión, una de las actividades más importantes de la época del 40 al 70, por la comercialización del café que se exportaba a Europa vía Iquitos. Este personaje usaba el pilón, para descascarar al grano del café, una especie de mortero de madera fue uno de los elementos que dio gloria económica a la provincia de Lamas.

Finalmente, en la plaza mayor de Lamas, encontramos a la “pretinera”, una práctica de la mujer lamista que fue durante mucho tiempo el sustento para su familia. Sus manos eran bendecidas con la habilidad de tejer pretinas (cintos) que tenía más de un uso. La mayoría de las “pretineras” vivían en el barrio suchiche en cuyas calles más de una mujer transformada el algodón en hilos de colores de bellas pretinas.

En definitiva, hay mucho por observar en la plaza mayor de Lamas, un lugar emblemático de la ciudad que espera la visita de oriundos y extranjeros.