Plan estratégico de la DRELM permite retomar el vínculo entre estudiantes y docentes
Nota de prensaTodo se da en el marco del plan estratégico “La Educación no para”. También promueve la matrícula de niñas y niños que no están registrados en el sistema educativo.

Fotos: Equipo de Imagen y Comunicaciones de la DRELM
18 de mayo de 2021 - 5:08 p. m.
La Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM), en un trabajo conjunto con la UGEL N°05, integrantes de la estrategia Barrio Seguro del Ministerio del Interior y la junta directiva local, empadronaron a los estudiantes de la sexta zona plana, ubicada en el distrito de El Agustino. Durante ese trabajo ubicaron a niñas, niños y adolescentes que no estaban matriculados en ninguna institución educativa, y a otros que no podían seguir sus clases a distancia por falta de conectividad.
Los especialistas utilizaron la estrategia ‘puerta a puerta’ para hacer contacto con las familias. En total se registraron a 30 estudiantes, que oscilan entre 6 y 20 años, y que pertenecen a Educación Básica Regular y la Educación Básica Alternativa.
Posteriormente, para atender a la población empadronada, se inauguró un “Punto de Encuentro” en el local de la ONG Servicios Educativos El Agustino (SEA), ubicado en el Jr. Jorge Basadre S/N, de dicho distrito. Este establecimiento había sido acondicionado con carpetas, escritorios, además de cartulinas y papelógrafos, gracias al trabajo de los voluntarios de la DRELM, la UGEL, y de los miembros de comunidad.
Asimismo, se dispuso la atención de los estudiantes en tres grupos, en el primero se encontraban los de 1°, 2° y 3° grado de primaria, el segundo, los de 4° y 5° de primaria, mientras que, en el tercero, los 1°, 2°, 3° y 4° de secundaria. A cada nivel educativo se le brindó una hora de acompañamiento pedagógico y socioemocional, los cuales estuvieron a cargo de las mediadoras de la UGEL N°05 y voluntarios de la Cruz Roja.
Al ingresar al local, todos los estudiantes, con sus respectivas mascarillas, procedieron a lavarse las manos con agua y jabón, tal como lo dispone el protocolo de bioseguridad dispuesto por el Gobierno por la covid-19. Tras ello, cada uno se instaló en sus carpetas, respetando el distanciamiento social.
Durante las sesiones, las mediadoras de aprendizajes distribuyeron a cada uno de los estudiantes separatas y fueron guiándolos para que desarrollen sus actividades pedagógicas. Al finalizar la asesoría, les entregaron refrigerios.
Plan de continuidad y permanencia
Los 30 estudiantes empadronados fueron atendidos en el “Punto de Encuentro” de El Agustino. Por otro lado, las especialistas de la DRELM establecieron el contacto con sus familias para ayudarlos a que matriculen a sus hijas e hijos en una institución educativa.
Todas estas actividades forman parte del plan estratégico de la DRELM “La Educación no para”, que tiene como objetivo promover el retorno y la permanencia de los estudiantes al servicio educativo.
A la fecha, continúan operando ‘puntos de encuentro’ en la capital, como, por ejemplo, en la agrupación familiar Villa Rica y Virgen del Carmen, y en el A.H. Las Lumbreras de San Juan de Lurigancho.
Del mismo modo, se mantiene las coordinaciones con las municipalidades para que habiliten espacios de acompañamiento pedagógico para los menores que no pueden conectarse a sus clases virtuales desde casa. Entre los que vienen operando se encuentran el Tambo de la Educación’, de Surquillo, y la Escuela de Lima, ubicado en el Parque de la Muralla, en el Centro Histórico de la capital.
Los especialistas utilizaron la estrategia ‘puerta a puerta’ para hacer contacto con las familias. En total se registraron a 30 estudiantes, que oscilan entre 6 y 20 años, y que pertenecen a Educación Básica Regular y la Educación Básica Alternativa.
Posteriormente, para atender a la población empadronada, se inauguró un “Punto de Encuentro” en el local de la ONG Servicios Educativos El Agustino (SEA), ubicado en el Jr. Jorge Basadre S/N, de dicho distrito. Este establecimiento había sido acondicionado con carpetas, escritorios, además de cartulinas y papelógrafos, gracias al trabajo de los voluntarios de la DRELM, la UGEL, y de los miembros de comunidad.
Asimismo, se dispuso la atención de los estudiantes en tres grupos, en el primero se encontraban los de 1°, 2° y 3° grado de primaria, el segundo, los de 4° y 5° de primaria, mientras que, en el tercero, los 1°, 2°, 3° y 4° de secundaria. A cada nivel educativo se le brindó una hora de acompañamiento pedagógico y socioemocional, los cuales estuvieron a cargo de las mediadoras de la UGEL N°05 y voluntarios de la Cruz Roja.
Al ingresar al local, todos los estudiantes, con sus respectivas mascarillas, procedieron a lavarse las manos con agua y jabón, tal como lo dispone el protocolo de bioseguridad dispuesto por el Gobierno por la covid-19. Tras ello, cada uno se instaló en sus carpetas, respetando el distanciamiento social.
Durante las sesiones, las mediadoras de aprendizajes distribuyeron a cada uno de los estudiantes separatas y fueron guiándolos para que desarrollen sus actividades pedagógicas. Al finalizar la asesoría, les entregaron refrigerios.
Plan de continuidad y permanencia
Los 30 estudiantes empadronados fueron atendidos en el “Punto de Encuentro” de El Agustino. Por otro lado, las especialistas de la DRELM establecieron el contacto con sus familias para ayudarlos a que matriculen a sus hijas e hijos en una institución educativa.
Todas estas actividades forman parte del plan estratégico de la DRELM “La Educación no para”, que tiene como objetivo promover el retorno y la permanencia de los estudiantes al servicio educativo.
A la fecha, continúan operando ‘puntos de encuentro’ en la capital, como, por ejemplo, en la agrupación familiar Villa Rica y Virgen del Carmen, y en el A.H. Las Lumbreras de San Juan de Lurigancho.
Del mismo modo, se mantiene las coordinaciones con las municipalidades para que habiliten espacios de acompañamiento pedagógico para los menores que no pueden conectarse a sus clases virtuales desde casa. Entre los que vienen operando se encuentran el Tambo de la Educación’, de Surquillo, y la Escuela de Lima, ubicado en el Parque de la Muralla, en el Centro Histórico de la capital.