GRALL brinda asistencia técnica remota a agricultores liberteños

Nota de prensa

8 de mayo de 2020 - 8:49 p. m.

 

A pesar del confinamiento social que estamos atravesando, el sector público agrario en nuestra región no se ha detenido. Solo en el último mes, especialistas de la Gerencia Regional de Agricultura brindaron asistencia remota a alrededor de 450 agricultores, ayudándolos a atravesar diversas problemáticas que se presentan en el día a día.

 

Este servicio de asistencia remota para los hombres de campo de nuestra región, denominado “Aló Agricultura”, viene funcionando con mucha anterioridad para atender satisfactoriamente a los productores que se encuentran en las provincias más alejadas de la región; sin embargo, en medio de esta emergencia su uso ha cobrado vital importancia, habiéndose convertido actualmente en el medio más inmediato de asistencia a los agricultores.

 

“No solo esperamos que los productores nos llamen para hacer sus consultas, nosotros estamos continuamente comunicándonos con ellos. Estaremos separados físicamente, pero seguimos unidos en el trabajo a favor del sector agraria de La Libertad”, señaló el gerente regional de Agricultura, Néstor Mendoza Arroyo.

 

Cuando las papas queman, el sector agrario está presente

 

La Libertad se ubica como el primer productor y líder en muchos cultivos, tales como: caña de azúcar, palto, arándano, trigo, cebada y tarwi. Asimismo, nos ubicamos en segundo lugar en la producción de espárrago, arveja, pimiento morrón. En papa, piña, alcachofa, cebolla, piquillo y ají, estamos en tercer lugar; y en vid y cebolla en cuarto lugar, mientras que en arroz y haba seca ocupamos el quinto lugar a nivel nacional.

 

De ahí, la importancia esencial y estratégica del sector agrario en la economía nacional y regional, pues incluso en “guerra” las personas de todas las edades deben seguir alimentándose. Por tanto, nuestros 127 mil productores agrarios continúan trabajando la tierra, aun ante las inclemencias del clima, insuficiencia de recurso hídrico, heladas y friajes, haciéndonos recordar que son la despensa de nuestras ciudades.