Jueza suprema titular Emilia Bustamante Oyague aborda el compromiso ético en el sistema judicial peruano

Nota de prensa
Reflexiones en el Bicentenario de la Justicia.
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9 de abril de 2024 - 12:47 p. m.

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La jueza suprema titular Emilia Bustamante Oyague expresó que no se puede generalizar que todos los jueces del Perú son antiéticos o que son personas que hacen daño. “No, los jueces tenemos muchos valores y eso es bueno que se dé a conocer”, subrayó.
La magistrada expresó que la ética es un elemento importante e invisible a la vez. “La ética está presente siempre en nuestra manera de actuar, es la que nos revela cómo somos, cómo nos comportamos”, afirmó.
Añadió que lo ético “no tiene nada que ver con la coima, la ética tiene que ver con el desempeño de uno, trabajar acorde con lo que uno debe hacer, no se ve, no se puede tocar, las malas prácticas deben ser rechazadas”.
En el año del Bicentenario de la Justicia, la doctora Bustamante Oyague refiere que ser jueza en estos tiempos es un reto.
“Un reto que nos anima, nos alienta porque vemos que el sistema de justicia está consolidándose; claro que quisiéramos mejores resultados, pero de cara a los 300 años con las herramientas tecnológicas, con la aplicación de la justicia con proyección a la comunidad, con el expediente electrónico que va a consolidarse en cuatro o cinco años; creo que estaremos en otro tipo de Poder Judicial, y las perspectivas siempre van a ser positivas y buenas”, acotó.
PROYECCIÓN SOCIAL
La magistrada recordó sus épocas de estudiante y docente en la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Católica donde hizo proyección social en difusión legal con programas en medios de comunicación.
“Hacíamos miniespacios de orientación legal con participación de los alumnos sobre temas importantes, temas sociales, temas del día a día”, indicó.
Añadió que hoy todos hablan de los derechos humanos y de los convenios internacionales sobre derechos humanos. “Pero es increíble que haya personas que no tienen una partida de nacimiento o problemas de padres que abandonan a sus hijos y no los inscriben”, agregó.
Respecto a su decisión de ser jueza dijo: “La vida me fue llevando a la Judicatura, quería dedicarme a la docencia, pero luego la investigación, la docencia y las publicaciones, terminaron orientándome a otras alternativas”, refirió.
Y añadió: “Con el tiempo se fue fortaleciendo la idea de ser jueza, no es que uno tenga la profesión y ocupación ahí. Mi vida en particular fue una suma de muchas experiencias, que yo las veo ahora hacia atrás y digo ‘acá estoy’ porque todas estas experiencias me fortalecen y me dan los elementos necesarios para ser una buena jueza”.

Lima, 9 de abril de 2024