Sala de Extinción de Dominio de La Libertad dispone traspaso de propiedad obtenida por tráfico de drogas luego de casi 38 años

Luego de casi 38 años, los magistrados de la Sala Transitoria Especializada en Extinción de Dominio de la Corte de La Libertad dispusieron la extinción de los derechos y el inmediato traspaso del inmueble ubicado en Maynas - Loreto, al Estado peruano; ello tras comprobar que dicha propiedad fue adquirida por Lucio Tijero Guzmán, con el dinero de su actividad ilícita de tráfico de drogas.

Los jueces superiores Zamora Barboza, Falla Salas y Florián Vigo indicaron que la extinción de derecho sobre dicha propiedad se realiza sin importar el tiempo que ha transcurrido desde la sentencia del imputado ya que, si se comprueba su adquisición ilícita, éste no tiene derecho de transferir o mantener dicho bien.

"Si bien la extinción de dominio del bien inmueble de Maynas (Loreto) se produjo más de treinta y siete años de la ocurrencia del delito y de la percepción de ganancias ilícitas, debe resaltarse que la disposición contenida en el Título Preliminar de la Ley de Extinción de Dominio indica que no importa la aplicación retroactiva de la Ley sino su retrospectiva, ello significa que es válido la extinción de dicho derecho de propiedad de comprobarse su adquisición ilícita", explicaron los magistrados de dicha sala.

Durante la audiencia de apelación, se recordó que Tijero Guzmán fue sentenciado a cadena perpetua luego de acreditarse su liderazgo en la organización criminal dedicada al tráfico de drogas durante la década del ochenta; actividad que le permitió adquirir diversos bienes muebles e inmuebles.

Además, se dio a conocer que la empresa Servicio Peruano de Ingeniería de Petróleo del Oriente S.A. compró a Lucio Tijero, por medio de una apoderada, dicho inmueble en 1984, pese a la existencia del expediente que señalaba la presunta adquisición de dicha propiedad con dinero obtenido del tráfico ilícito de drogas; por lo que los magistrados declararon fundado esta extinción de dominio.

Cabe indicar que Lucio Tijero Guzmán tenía su centro de narcotráfico en la selva, teniendo alianzas con los colombianos Evaristo Porras y el extinto Pablo Escobar. Posteriormente, fue capturado en Estados Unidos y liberado luego de brindar información sobre otros narcotraficantes y el vínculo que tenía el ex asesor presidencial peruano Vladimiro Montesinos; sin embargo, en setiembre de 1997 fue condenado a cadena perpetua y recluido en el penal La Capilla-Puno, en donde falleció el 26 de octubre del 2016.