Emblema de mujer
Nota de prensaFue nombrada Imagen Cultural de la Región, por la municipalidad de su ciudad y el gobierno regional, pues ha dejado muy en alto a Moyobamba, a lo largo de su vida. Doña ‘Cotita’, como la conoce la gen

16 de enero de 2021 - 5:18 p. m.
En junio del 2017, ‘la Pandilla de Moyobamba’ ingresó al Libro de los Récord Guinness como el baile folclórico peruano más grande del mundo, al reunir a 1,585 parejas de danzantes de esta tradicional expresión del arte popular amazónico, en la Plaza de Armas de la capital de San Martín. Ahí, entre toda la multitud, no podía faltar Clotilde López Mori, que en ese entonces tenía 77 años, y ya había sido nombrada Imagen Cultural de la Región, por la municipalidad de la ciudad y el gobierno regional. Aun hacía gala de la alegría y energía que demanda la pandilla, incluso daba pequeños saltos. Al año siguiente, en el 2018, fue la última vez que bailó, lo hizo maravillosamente, en la Semana Turística, con una tinaja llena de chicha encima de su cabeza, desafiando la gravedad.
En el afiche promocional de la película peruana “Moyobamba. La historia contada a través de su gente”, Doña Clotilde, o ‘Cotita’, como la conoce el pueblo, se luce con un vestido floreado y una tinaja apoyada en su cabeza. La foto se la hicieron cuando tenía 77 años, pero esa sonrisa cálida y sabia, la rejuvenecía por los menos 10 años. La gente la reconoce en la calle de su ciudad y le expresa su cariño. Pero ella siempre mantuvo los pies en la tierra. Y, hoy, con la alegría y energía con la que bailaba la pandilla, va al mercado y compra plátanos, papayas, pepinos, piñas, cocos, entre otras frutas y hortalizas para venderlas en un puesto que ha acondicionado en la puerta de su casa, en el barrio de Lluyllucucha. Doña Cotita es usuaria de Pensión 65, y estos productos los compra gracias a los bonos y subvenciones que ha venido recibiendo.
Hoy, Clotilde tiene 80 años pero vive con la misma pasión que sentía cuando empezó a bailar, a los doce años, y empezó a representar a Moyobamba en diferentes actividades ligadas a la danza de la pandilla, en ciudades como Chiclayo, Trujillo, Piura, Catacaos y hasta en el Congreso de la República en Lima, donde se lanzó la Semana Turística de Moyobamba, allá por el año 1974.
“Viudita soy. Mi esposo murió hace como 12 años. ‘Pandillando’ conocí a mi esposo. Uno de mis 8 hijos se llama Pasión, tiene 50 años y ahora sigue mis pasos, es muy buen danzante. Yo no bajo la guardia, y compro frutas para vender. También hago tamales, juanes, lo hago para divertirme, pero también gano alguito… Y Pensión 65 me ayuda a comprar estas cositas”, dice Doña Clotilde.
En el afiche promocional de la película peruana “Moyobamba. La historia contada a través de su gente”, Doña Clotilde, o ‘Cotita’, como la conoce el pueblo, se luce con un vestido floreado y una tinaja apoyada en su cabeza. La foto se la hicieron cuando tenía 77 años, pero esa sonrisa cálida y sabia, la rejuvenecía por los menos 10 años. La gente la reconoce en la calle de su ciudad y le expresa su cariño. Pero ella siempre mantuvo los pies en la tierra. Y, hoy, con la alegría y energía con la que bailaba la pandilla, va al mercado y compra plátanos, papayas, pepinos, piñas, cocos, entre otras frutas y hortalizas para venderlas en un puesto que ha acondicionado en la puerta de su casa, en el barrio de Lluyllucucha. Doña Cotita es usuaria de Pensión 65, y estos productos los compra gracias a los bonos y subvenciones que ha venido recibiendo.
Hoy, Clotilde tiene 80 años pero vive con la misma pasión que sentía cuando empezó a bailar, a los doce años, y empezó a representar a Moyobamba en diferentes actividades ligadas a la danza de la pandilla, en ciudades como Chiclayo, Trujillo, Piura, Catacaos y hasta en el Congreso de la República en Lima, donde se lanzó la Semana Turística de Moyobamba, allá por el año 1974.
“Viudita soy. Mi esposo murió hace como 12 años. ‘Pandillando’ conocí a mi esposo. Uno de mis 8 hijos se llama Pasión, tiene 50 años y ahora sigue mis pasos, es muy buen danzante. Yo no bajo la guardia, y compro frutas para vender. También hago tamales, juanes, lo hago para divertirme, pero también gano alguito… Y Pensión 65 me ayuda a comprar estas cositas”, dice Doña Clotilde.